Los agentes pastorales, representantes de grupos litúrgicos y movimientos eclesiales, los catequistas y los adultos mayores, fueron parte de la Asamblea Sinodal Parroquial convocada por la comunidad de San Leopoldo y Vicaría Croata.
La Asamblea Sinodal Parroquial convocó a más de 30 personas. Según explicó Javier Lavado, facilitador del encuentro, esta fue una oportunidad para generar espacios inclusivos que permiten el acercamiento de la Iglesia con el Pueblo de Dios.
Para el párroco Marko Jukic, las asambleas sinodales son una muestra real de la diversidad y riqueza que existe en la comunidad. Y añadió: «Las personas se han sentido escuchadas y valoradas, han identificado propuestas concretas para mejorar la formación doctrinal, la organización pastoral y la misión evangelizadora», comentó.
La Asamblea Sinodal no es solo un evento, sino un verdadero kairós, un tiempo de gracia donde el Espíritu Santo habla a través del Pueblo de Dios.
Durante los plenarios de la asamblea, se evidenció un profundo deseo de vivir la fe con mayor coherencia, humildad y compromiso. “La Asamblea nos permitió reconocer los dones presentes en nuestra comunidad, y renovar el impulso misionero con una mirada más sinodal, más cercana y más abierta al Espíritu”, expresó la comunidad parroquial.
El Padre Marko Jukic recordó que el espíritu sinodal nos invita a escuchar con apertura, discernir juntos y construir propuestas desde la fe: “No tengan miedo de los desafíos que puedan surgir durante las asambleas sinodales. Cada dificultad es también una oportunidad para crecer en unidad y fidelidad. Los invito a sentir el llamado a abrir sus puertas, sus corazones y sus agendas para que el sueño de una Iglesia más sinodal y misionera se haga realidad en cada rincón de nuestra Arquidiócesis”, acotó.
