Tras haber vivido las asambleas sinodales en 129 parroquias de la arquidiócesis limeña, el Cardenal Carlos Castillo ha convocado oficialmente a la II Asamblea Sinodal Arquidiocesana de Lima, que se celebrará este 6, 7 y 8 de enero en el Colegio San Agustín.
Son muchas las razones para creer y sentir que la II Asamblea Sinodal Arquidiocesana de Lima marcará un hito en la vida de nuestra Iglesia. Han pasado seis años desde la primera asamblea convocada por el Cardenal Castillo. Ahora, después de haber afianzado un camino de amplia escucha y discernimiento, nos preparamos para el segundo gran encuentro que congregará toda la diversidad de voces, rostros y lenguas de nuestra ciudad de Lima.
Una nueva asamblea sinodal en el Año Jubilar de Santo Toribio de Mogrovejo
«Siguiendo a Jesús, como Santo Toribio de Mogrovejo, somos misioneros de esperanza«, inspirado en el lema del Año Jubilar por los 300 años de canonización de nuestro santo patrón, el Primado del Perú se ha dirigido a la arquidiócesis limeña para anunciar un «nuevo proceso de renovación con matices distintos de observaciones, ideas y palabras que queramos decir».
La II Asamblea Sinodal Arquidiocesana de Lima recoge todos los aportes de las asambleas que han habido en las parroquias y en distintos grupos que conforman la comunidad cristiana de Lima.
El Cardenal Castillo ha recordado que la Iglesia «es una comunidad dinámica que camina junta» y está llamada a responder «a los desafíos del mundo, de la vida, de los barrios y situaciones concretas». Por ello, tras haber escuchado ampliamente al Pueblo de Dios y presentado el Instrumentum Laboris que acompañará a la Iglesia de Lima en estos tres días de asamblea, se ha convocado a las diferentes delegaciones de cada parroquia, incluyendo representantes de realidades emergentes como: ollas comunes, comunidades quechuahablantes, universidades, hermandades, entre otros.
Responder a los tiempos con los pies en la tierra
El arzobispo de Lima reflexionó sobre la importancia de «construir la Iglesia desde las diversas realidades en que vamos caminando», no por una cuestión de moda pasajera, sino porque es necesario «responder a los tiempos con los pies en la tierra, conociendo y comprendiendo los problemas, escuchando y recogiendo las cosas interesantes que surgen de nuestro pueblo para potenciarlas y hacerlas crecer».
El Prelado explicó que los frutos de este histórico encuentro no sólo delinearán las prioridades en el gobierno pastoral de Lima, también nos encaminarán hacia la Asamblea Eclesial de 2028, en comunión con todas las iglesias del mundo:
«La II Asamblea Sinodal Arquidiocesana de Lima permitirá abrirnos paso en este mundo tan difícil que necesita del concurso, de la iniciativa y de las orientaciones que todos podemos aportar desde la misma experiencia», sostuvo.
Qué linda es una Iglesia que escucha y conversa, que no impone, se alegra con su pueblo y, armoniosamente, va caminando.
La II Asamblea Sinodal Arquidiocesana tendrá lugar este 6, 7 y 8 de enero en el Colegio San Agustín, de 9am a 5pm. Las inscripciones se vienen realizando a través de cada parroquia. Cada delegación estará conformada por:
– Párroco o administrador
– Coordinador/a del Consejo Pastoral Parroquial (CPP)
– Coordinador/a de la Pastoral Juvenil Parroquial
– Miembros de comunidades religiosas que participan en la parroquia
– Vicario/s parroquial/es
– Un miembro del Equipo Parroquial de Animación Pastoral (EPAP)
– Laicos que hayan participado de la Asamblea Sinodal Parroquial, pero que no pertenezca a algún grupo de la parroquia.
– Miembros de realidades emergentes (hermandades, comunidades quechuahablantes, ollas comunes, mercados, etc.)
Durante los tres días de asamblea se reflexionará en torno a los temas propuestos en el Instrumentum Laboris: Identidad e integración, Participación, Acogida y acompañamiento, Vida en el Espíritu, Sacramentos y Liturgia, Formación, Pastoral evangelizada y evangelizadora, Pastoral social y solidaridad, Comunicación. Se estima la participación de más de mil personas.
