«En el día de la Epifanía, hemos convocado a la Asamblea Sinodal para que conversemos juntos sobre cómo vamos a anunciar el Evangelio en las nuevas circunstancias, búsquedas, sueños, heridas, intereses y necesidades de los limeños», fueron las palabras del Arzobispo de Lima y Primado del Perú, Mons. Carlos Castillo, a vísperas de iniciarse la Asamblea Sinodal Arquidiocesana de Lima 2020 en el Colegio San Agustín.
«La Epifanía significa la revelación de Dios a los pueblos que están más allá de Israel – explicó Monseñor Castillo durante su homilía en la Catedral de Lima – y en nosotros también se realizan aquellas extraordinarias y bellas palabras del profeta Isaías (60,1-6), que le anuncia al pueblo de Israel que ha de levantarse porque llega su luz»: ¡La gloria del Señor amanece sobre ti! El profeta. Isaías, por tanto, nos muestra que «Dios ama lo pequeño».
«No se hablaba de la gloria de una nación – continuó el Arzobispo de Lima – se hablaba de la gloria de los pobres de una nación. El anuncio del nacimiento de un rey que vino a traer nuevas maneras de vivir hizo temblar a una Jerusalén donde se imponía el abuso, el maltrato, el dominio de Herodes y su espantosa tiranía».
Discernir para encontrar el camino que el Señor nos propone
Y refiriéndose al Evangelio de Mateo (2,1-12) que narra el camino emprendido por los Reyes Magos, Mons. Castillo agregó: «Los Reyes Magos están abiertos a la novedad, dispuestos a encontrar a la nueva estrella que guíe sus vidas de otra manera. De igual forma nosotros necesitamos siempre de la apertura, porque el ser humano, con sus intereses, sus locuras y sus sueños, tiene que discernir para encontrar el camino que el Señor nos propone».
Hoy es el día del encuentro de todos los pueblos de la tierra con Jesús, desde sus intuiciones, sus sueños, sus búsquedas, sus pasiones, sus ideales, sus utopías, y el Señor viene a alentar en nosotros lo mejor de nuestras búsquedas
«Hoy también es indispensable alentar las cosas buenas en nuestra sociedad y en nuestra ciudad de Lima, porque también estamos llenos de sueños, llenos de esperanzas, llenos de heridas, llenos de búsquedas, llenos de pasiones y llenos de intereses» – precisó el Primado del Perú.
Una Asamblea Sinodal en el día de la Epifanía
El obispo de Lima también recordó la Asamblea Sinodal Arquidiocesana convocada para este lunes 06, martes 07 y miércoles 08 de enero en el Colegio San Agustín que reunirá a todos los delegados, párrocos, religiosos, vicarios parroquiales y obispos de nuestra arquidiócesis: «En el día de la Epifanía, hemos convocado a la Asamblea Sinodal para que conversemos juntos sobre cómo vamos a anunciar el Evangelio en las nuevas circunstancias, búsquedas, sueños, heridas, intereses y necesidades de los limeños» – subrayó.
Queremos acordar entre nosotros cómo vamos a anunciar el Evangelio con esperanza para que se cumpla también el amor, la paz y la justicia del Señor en nuestra ciudad, en un mundo complejo y difícil pero que está ansioso de encontrar una luz en medio del Señor. La muestra más grande de la paz, es la evangelización.
«La Iglesia debe anunciar el Evangelio dialogando con la gente – prosiguió – ayudando a comprender y mostrando que Jesús ha nacido para traer esperanza y no para darnos miedo».
«Que Dios bendiga nuestra ciudad y que todos podamos seguir alentando la evangelización y el anuncio; que cada uno, cada cristiano, cada comunidad, cada familia sea anunciadora del evangelio dialogando y conversando dentro y fuera de las familias, ayudándonos mutuamente», finalizó.