Cristóbal Bernardo Mejía Corral es nombrado nuevo obispo de Chulucanas

El Santo Padre ha aceptado la dimisión al gobierno pastoral de la Diócesis de Chulucanas (Perú) presentada por Mons. Daniel Thomas Turley Murphy.

Además el Papa Francisco ha nombrado obispo de Chulucanas (Perú), al Rev. Cristóbal Bernardo Mejía Corral, del clero de la diócesis de Lurín (Perú) y párroco de Cristo el Salvador.

Así lo ha comunicado hoy, 2 de abril de 2020, la Oficina de Prensa de la Santa Sede.

Mons. Daniel Thomas Turley Murphy presentó su renuncia por motivo de edad. El prelado supera los 75 años, edad canónica en la que los obispos pueden solicitarla al Papa.

Rev. Cristóbal Bernardo Mejía Corral

Nació el 4 de diciembre de 1954 en la provincia civil de Carhuaz, Ancash, en ese entonces parte de la archidiócesis de Lima. Antes de entrar en el Seminario estudió Electricidad en el Instituto Técnico Jorge Chávez de Lima. Ingresó en el Seminario Mayor Santo Toribio de Mogrovejo de la archidiócesis de Lima y completó sus estudios filosóficos y teológicos en la Facultad de Teología Pontificia y Civil de Lima (1983-1989).

Fue ordenado sacerdote el 18 de diciembre de 1989 para la archidiócesis de Lima. Luego, en 1996, con motivo de la creación de la diócesis de Lurín, desmembrada de la archidiócesis de Lima, se incardinó en la nueva diócesis de Lurín.

Ministerios

Su ministerio ha sido desarrollado en parroquias: vicario parroquial de El Niño Jesús, Archidiócesis de Lima (1989-1992); administrador parroquial de El Niño Jesús, Archidiócesis de Lima (1992-1994); párroco de San Francisco de Asís, Archidiócesis de Lima (1992-1998); y desde 1998 hasta hoy,  párroco de Cristo el Salvador, Diócesis de Lurín.

Otros ministerios desempeñados son vicario episcopal de la Diócesis de Lurín (1997-1999); vicario general de la Diócesis de Lurín (1999-2006). Desde diciembre de 2006 es miembro del Consejo Económico de la Diócesis de Lurín y desde 2007 hasta la fecha ejerce como miembro del Consejo de Consultores de la Diócesis de Lurín. Desde 2008 hasta la fecha es vicario foráneo de la foranía IV de la Diócesis de Lurín.

Ha sido director espiritual de los Misioneros Combonianos durante diez años y director espiritual de las Franciscanas Misioneras de María (1997-2000). Desde 2017 hasta hoy es padre espiritual de las Carmelitas Misioneras de Villa María del Triunfo, así como director espiritual de las siervas del Evangelio de Puente de Lurín y del Colegio de Maristas – S.J.M. (1992-1998).