Martín de Porres – Testimonio de fe y caridad siempre

En el mes de San Martín de Porres, Patrono de la Justicia Social, compartimos los momentos más emotivos que nos dejó la Celebración Eucarística en la Basílica Catedral de Lima, que por primera vez congregó a diferentes comunidades afroperuanas y representantes de otros países.

El último domingo 3 de noviembre, la Iglesia de Lima se congregó en el corazón de la capital peruana para rendir homenaje a Martín de Porres – «él nos enseñó que en el amor al otro está la esencia de una auténtica experiencia de fe» – comentó Mons. Guillermo Elías, Obispo Auxiliar de Lima.

Mons. Elías explicó que el camino de Martín consistió en salir a las periferias: «se inmoló como una hostia propicia siguiendo la vocación profunda de un corazón encarnado y con una experiencia profunda de Dios.»

Recordemos quienes nacimos marcados por este hermoso tono de piel que debemos aportar lo grande y lo hermoso que es ser negro, que podemos construir un mundo con otros, unidos a otros, y en esa amalgama que es el Perú, poder hacer una nación grande

«Martín profundiza en el amor de Dios» – recordó el Obispo Auxiliar de Lima – «él se sabe siervo de Dios porque amó con una profunda caridad nacida de una fe inquebrantable en el corazón al hermano, especialmente al pobre. Los amaba aún más de sí mismo, pues en su humildad juzgaba a todos más justos y mejores que él».

La comunidad afroperuana se hizo presente

Por primera vez, la Basílica Catedral de Lima logró reunir a diferentes movimientos afroperuanos del Callao, Comas y Cercado de Lima. También se hizo presente la Hermandad de Caballeros de San Martin de Porres y San Juan Masías; la Hermandad de Damas y Señoritas de San Martin de Porres y San Juan Masías; y la Hermandad de Sahumadoras Dominicas de la Basílica del Rosario.

Este histórico momento nos acerca a la Iglesia inclusiva y en salida que nos propone el Papa Francisco: «Los católicos queremos la anchura de la democracia, una democracia de corazón ancho que permita que todos participemos, nos reconozcamos y nos ayudemos sin dejar de ser nosotros mismos. Cada uno de nosotros debemos tener siempre el valor de recoger nuestra identidad y nuestras tradiciones y mostrarlas al otro para admirarlas, apreciarlas y gozar de su alegría», destacó Mons. Carlos Castillo, Arzobispo de Lima y Primado del Perú.

«Gracias al testimonio vivo de Martín de Porres hemos venido a celebrar esta fiesta, unidos a todos los hermanos que participan de la descendencia de origen africano, los afroperuanos. Y lo queremos hacer en la alegría de sabernos que no basta que haya un mestizaje diario, tenemos que hacer un mestizaje consciente, que reconozca el valor de cada cultura, de cada pueblo de nuestro país que cultiva en nuestro corazón su historia, sus tradiciones», agregó.