En el marco del Plan Pastoral Arquidiocesano, y con miras al próximo Sínodo sobre la Sinodalidad, el Clero de Lima se congregó en las instalaciones del Seminario Santo Toribio de Mogrovejo para participar de una asamblea sacerdotal junto a los obispos de nuestra jurisdicción.
«Después de 50 años de una eclesiología de apertura y participación, parece que se nos propone dar un paso más adelante, una eclesiología de sinodalidad», son las palabras de Monseñor Guillermo Elías, obispo responsable de la conducción y ejecución del Plan Pastoral de Lima; un llamado a construir un camino sinodal en el corazón de cada parroquia, con la participación activa de párrocos y laicos, unidos para estudiar e interpretar, desde la fe, la realidad de cada comunidad.
Este ha sido el punto de partida para abrir el diálogo y la escucha con los sacerdotes de nuestra Arquidiócesis, quienes intervinieron con sus aportes, sugerencias y sentires, como parte del proceso de integración del Plan Pastoral en la vida de la Iglesia de Lima.
No habrá un proceso de sinodalidad sin una profunda transformación de las estructuras.
Monseñor Elías aseguró que todo proceso sinodal requiere de la voluntad de los párrocos para involucrarse, así como de su sensibilidad cristiana ante los problemas de la comunidad y de la realidad social: «No podrá haber, en Lima, un proceso de sinodalidad sin una profunda transformación de las estructuras, y esto, para bien o para mal, depende de nosotros, los presbíteros. Mientras que el mundo va por donde va, nosotros, a veces, estamos donde solo queremos estar, con nuestras propias estructuras, con nuestras propias actitudes, con nuestros propios valores», reflexionó.
Goicochea: Estamos en un tiempo de cambio, de transformación.
Por su parte, el Padre Juan Goicochea, Vicario Episcopal de la Pastoral Arquidiocesana, recordó que este proceso de escucha y discernimiento en la Iglesia de Lima, ha comenzado hace tres años con la gran Asamblea Arquidiocesana, encuentro que reunió a más de 800 representantes de las parroquias de nuestra jurisdicción:
«Estamos, poco a poco, dando pasos. Los invito a participar activamente, a comunicarse, a ser sinceros; no queremos juzgar a nadie, sino, sencillamente, caminar juntos y entender que estamos en un tiempo de cambio, de transformación», señaló.
Goicochea adelantó que este proceso sinodal ha contemplado a otros grupos humanos que participarán en una semana sinodal: «Hoy queremos recoger el sentir actual, queremos escuchar a los migrantes, a las mujeres, a las madres de las ollas comunes, a los universitarios, a los periodistas, a los profesionales», apuntó.
Arzobispo de Lima: Escuchar la voz de Dios escondida en la historia.
En su intervención, nuestro arzobispo, Monseñor Carlos Castillo, explicó que el surgimiento de la Pandemia no fue impedimento para que nuestra Iglesia continuara el camino sinodal que inició desde el año 2019: «Tuvimos que hacer una serie de cambios: empezamos a reunirnos por zoom y a tratar de hacer cosas de manera virtual, pero lo más importante es que no nos estancamos como diócesis; nos movimos dentro de los límites que podíamos, hicimos modificaciones mínimas, pero fue un gran esfuerzo de unidad que hemos trabajado, y yo estoy sumamente agradecido a todos ustedes, porque hemos aprendido a actuar juntos», reafirmó.
Somos demasiados en el mundo, y somos muy distintos unos de otros, los seres humanos y los creyentes; de tal manera que, para construir la Iglesia, necesitamos el aporte y la contribución de todos, juntos. Todos somos Pueblo de Dios, todos somos sujetos evangelizadores.
Monseñor Castillo hizo hincapié en la importancia de escuchar la voz de Dios escondida en la historia, no solamente en la vida de los creyentes: «Hay que rescatar el Cristo que está viviéndose en el corazón de las situaciones humanas diversificadas. Eso requiere, de nosotros, atención, humildad, sencillez, capacidad de ver que yo puedo tener una fe, pero hay alguien que tiene una fe naciente, que está surgiendo y que tiene que seguir su camino, el camino de Dios, no el camino que yo le imponga», resaltó.
Plenario de los sacerdotes y obispos.
Uno de los momentos más importantes de la asamblea sacerdotal, tuvo lugar en el trabajo grupal, donde se plantearon las siguientes preguntas:
-¿Cómo nos estamos integrando y caminando juntos como sacerdotes?
-¿Cómo estamos ejerciendo la autoridad en nuestra Arquidiócesis, comunidades religiosas y parroquias?
-¿Cómo te está yendo en la implementación del Plan Pastoral de la Arquidiócesis?
-¿Tu parroquia ya cuenta con Consejo Parroquial Pastoral (CPP) y Equipo Parroquial de Animación Pastoral (EPAP)?
-¿Cómo damos participación a los laicos en las diferentes instancias de sinodalidad en nuestra Iglesia de Lima?
La respuesta a estas preguntas fueron escuchadas por nuestro arzobispo, obispos auxiliares, y comisión responsable del Plan Pastoral. Al término de la jornada, el Padre Juan Goicochea anunció que se elaborará un consolidado de ideas y aportes, documento que se integrará a las conclusiones de otros grupos humanos (ollas comunes, migrantes, mujeres, etc.) durante la semana sinodal, próxima a desarrollarse del 17 al 23 de julio.