Más de 100 sacerdotes participaron del Primer Retiro espiritual del Clero 'en línea'

Este miércoles 20 de mayo más de 100 sacerdotes de la Arquidiócesis de Lima participaron del Retiro espiritual del Clero ‘en línea’, el primero que se registra en América Latina, para meditar sobre la dura realidad que se vive en el mundo por la pandemia y la acción de la Iglesia: «en este retiro, estamos sintiendo el llamado a una conversión de nuestro modo de ser pastores, repensando nuestro modo de servir y de celebrar, abriendo nuestra Iglesia a una más amplia participación, haciendo de cada parroquia una fuente de recuperación humana y social, educadora de cada persona para una fe madura y solidaria», expresó el Arzobispo de Lima.

«El mundo entero está sufriendo y tiene que estar unido frente al desafío histórico», lo dijo el Papa Francisco durante su mensaje de Pascua del Domingo de Resurrección. La pandemia nos desafía a ser solidarios para acompañar a quienes más sufren, y en medio del distanciamiento social que vivimos, surge en la Iglesia de Lima la capacidad creativa para permanecer unidos espiritualmente.

El primer Retiro virtual del Clero ha representado un nuevo desafío para los más de 100 sacerdotes que logró convocar el Arzobispado de Lima, especialmente para aquellos participantes que, por primera vez, recurren a la tecnología para este tipo de comunicaciones.

Arzobispo de Lima: Atender creativamente en la emergencia

«Durante la cuarentena, cada cual en su parroquia empezó a sentir que la forma de ser pastor y de ser Iglesia cambiaba notablemente – comenta Monseñor Carlos Castillo, Arzobispo de Lima en toda nuestra Arquidiócesis surgió no solo el aislamiento social sino la voluntad de convertirlo en comunión espiritual, primero en cada familia y luego como parroquia y diócesis».

«Acomodamos los horarios y muchas misas ‘en red’ contaban con más participantes que en el templo, y la misa por TV desde la Catedral de Lima también fue frecuentada ampliamente. Esta forma no es la mejor, la comunidad concreta es la propia, pero este aprendizaje de algo nuevo ha sido inicio de una educación que sabe renovarse y atender creativamente en la emergencia», agregó Monseñor Castillo.

Los párrocos de Lima, en este retiro, estamos sintiendo el llamado a una conversión de nuestro modo de ser pastores, repensando nuestro modo de servir y de celebrar, abriendo nuestra Iglesia a una más amplia participación, haciendo de cada parroquia una fuente de recuperación humana y social, educadora de cada persona para una fe madura y solidaria

«Nuestro retiro de hoy ha sido para inspirarnos en el Señor Resucitado que a las mujeres les remueve las piedras de la rigidez para saber decir al abatido una palabra de aliento. El padre Carlos Cardó nos ha ayudado a ver hondamente que las piedras tan grandes de una forma de vivir individualista, de economías insolidarias, de lazos sociales rotos, de familias rotas por la muerte prematura, de rostros humanos deprimidos por la desesperación, pueden removerse por el Espíritu de amor que ha llenado el corazón de tantos que han entregado su esfuerzo libre y voluntario para testimoniar que es posible salvarse con los otros y no solos», subrayó el Arzobispo de Lima.

La jornada de retiro espiritual inició con la ponencia del Padre Carlos Cardó Franco S.J., quien expuso el tema ‘La Iglesia en tiempos de post-pandemia’. Al término de la reflexión se dispuso de un espacio de 40 minutos de meditación en silencio frente al Santísimo, y posteriormente se realizó una ronda de intervenciones espontáneas con los sacerdotes participantes.