Vicaría de la Juventud: primera asamblea con delegados juveniles

«En todas las diócesis del mundo estamos tratando de ver cómo hacemos el sueño de Francisco de una Iglesia al servicio de los jóvenes y los más pobres», comentó el Arzobispo de Lima Carlos Castillo en el inicio de la primera asamblea de la Vicaría de la Juventud que congregó alrededor de 100 delegados de las parroquias de la Arquidiócesis de Lima.

«Jesús ha venido para que toda la humanidad se conozca, se quiera, se estime, se ayude» – continuó – «Los hemos invitado para iniciar un camino de diálogo en que todos podamos aportar cómo hacer una Iglesia más joven, y cómo los jóvenes pueden ayudar a la diversidad de situaciones con sus propias iniciativas e ideas».

Construir juntos la Pastoral Juvenil.

«Vamos a hablar de lo que van a hacer, de lo que se hizo en el pasado que es importante, pero del presente que son ustedes, protagonistas de todas sus actividades», comentó Luis Rodríguez, Secretario de la Vicaría de la Juventud.

Posteriormente vino una rueda de intervenciones por parte de los jóvenes delegados de distintas parroquias de la Arquidiócesis de Lima, manifestando sus preocupaciones ante las distintas realidades y situaciones que se viven en nuestra sociedad y cómo podemos hacer para construir juntos una Iglesia donde nos entendamos, sepamos acoger y colaborar juntos.

A partir de la reflexión de los jóvenes surgieron dos primeras preguntas:

1. ¿Qué hacemos para estar mejor formados?

2. ¿Qué hacemos para comprender a los que están afuera?

«Qué alegría poder escucharles», comentó el reverendo César Oré – «Eso es importante, la pastoral de la escucha, tratar de interrelacionarnos con la presencia del Arzobispo de Lima porque la Iglesia somos todos».

«Cuando nos ponemos a pensar la figura del Buen Pastor, recordamos que el pastor va adelante, pero también atrás, porque va empujando a las ovejas que se quedan un poco relegadas, y también va en el medio, conociendo, animando, alentando. Por eso esta pastoral no es de uno, sino de todos, porque es un camino que debemos avanzar juntos hacia donde el Señor nos inspire».

Una Iglesia más dinámica.

Finalmente, Monseñor Castillo agradeció la participación de los jóvenes y reflexionó sobre las esperanzas y expectativas de la Vicaría de la Juventud:

«Muchas gracias por todas las intervenciones porque nos revelan que estamos atentos a los problemas. El Papa nos ha dicho que la pastoral juvenil debe ser sinodal, es decir, hacer un camino juntos, acordar y decidir juntos y que eso guíe a todos, considerando las opiniones de todos».

«Han mostrado una serie de situaciones y problemas que suceden y donde la Iglesia no está presente. Para eso se necesita una parroquia más dinámica, que esté en salida, y es difícil con la estructura que tenemos que obliga a tener a la gente en la parroquia», indicó.

Dialogar con el mundo.

Por eso, es necesario que «pensemos juntos en una Iglesia misionera, una Iglesia dinámica que a través de distintos medios acompañen a las personas y continúen evangelizando», añadió.

El Arzobispo de Lima recalcó que «debemos dialogar con el mundo, conversar con todos. El 90% de los jóvenes no vienen a la Iglesia, y tenemos que ponernos en sintonía con aquellos que están afuera, acogerlos, incentivar los talentos».

La primera asamblea de la Vicaría de la Juventud concluyó con una invitación a todos los jóvenes para asistir al próximo domingo 9 de junio, día de Pentecostés, en la Catedral de Lima.