Cáritas Lima: red solidaria entre parroquias y sociedad civil

A lo largo del año 2022, en época de pospandemia, la Vicaría de Pastoral y Dignidad Humana – Cáritas Lima, ha venido desarrollando un trabajo integral y pastoral orientado, principalmente, a la asistencia alimentaria, la salud y protección social en favor de las familias más vulnerables de nuestra ciudad.

En ese sentido, conversamos con Jorge Herrera, director de Cáritas Lima, quien compartió un breve alcance de todo lo desarrollado durante el año 2022. Los resultados obtenidos han sido posibles gracias a la cooperación y la colaboración comunitaria de diferentes parroquias de nuestra Arquidiócesis, así como otras instituciones públicas y privadas, empresas y la sociedad civil.

Prioridad: atención alimentaria en medio de la crisis.

“En el escenario de pospandemia, hemos tratado de ver qué requiere la familia para continuar afrontando esta situación. Independientemente de la Pandemia, en la actualidad, se suma la situación de crisis social, económica y política que viene afrontando nuestro país. Es por eso que Cáritas Lima ha priorizado la atención alimentaria”, ha explicado Jorge Herrera.

Prácticas alimentarias y cocinas saludables.

En el tema de la salud, el director de Cáritas Lima afirmó que, a través del programa “Cocinas Saludables”, se ha brindado capacitaciones a las madres de las ollas comunes y de los comedores parroquiales y populares para que puedan fortalecer sus conocimientos y capacidades en favor de prácticas alimentarias saludables para la preparación de sus alimentos.

Red de parroquias en sintonía.

Por otro lado, el año 2022 fue un año clave para el trabajo comunitario con las parroquias de nuestra jurisdicción eclesiástica. Herrera aseguró que las comunidades parroquiales se han encargado de recabar información relevante sobre la situación en la que se encuentran los hermanos de las ollas, comedores populares y vecinos de comunidad.

Esta información ha sido de gran importancia para que la entrega de donaciones, víveres y menestras, se realice de forma organizada, pero, sobre todo, justa. En esa línea, gracias a este trabajo articulado, a través del programa «Asistencia Alimentaria», Cáritas ha entregado, mensualmente, un promedio de 20 kits a las ollas comunes y comedores de la ciudad (para un promedio de 20 días).

Ampliar y fortalecer la sostenibilidad de las ollas comunes.

El programa Mateo 5:16, ha permitido que se amplie y fortalezca la sostenibilidad de las ollas comunes y comedores de la ciudad. Así lo refirió Jorge Herrera: “Convocamos a las parroquias de nuestra Arquidiócesis, aquellas con mayor estabilidad económica, para que apoyen a las que se encuentran en situación de vulnerabilidad. De esta manera, la parroquia se organiza con su comunidad para recibir las donaciones y, luego, Cáritas se encarga de distribuir lo recolectado entre las parroquias que lo necesitan».

A la fecha, venimos trabajando con 19 parroquias y estamos logrando una intervención más integral y una cadena solidaria donde participan parroquia – comunidad – sociedad.

De otro lado, entre las principales perspectivas para el 2023, el director de Cáritas Lima adelantó que se complementarán todos los programas y proyectos desarrollados el año pasado:

“La prioridad para este 2023 se seguirá centrando en el eje alimentario, ya que la situación de crisis que venimos atravesando y la guerra en Ucrania, afecta fuertemente a nuestro país. Entonces, continuaremos acompañando a las familias a través de la entrega de kits, entre otros programas más», informó.

Cáritas Lima anunció que se avecinan nuevas campañas de despistaje de anemia y desnutrición «con el fin de hacer un seguimiento y monitoreo, de manera especial, a niños menores de 5 años”.

Agradecimientos.

Finalmente, Herrera se mostró agradecido «por la solidaridad, el compromiso y la confianza plena de las instituciones, empresas, parroquias y sociedad en general, que se han sumado a las actividades que ha realizado Cáritas Lima a lo largo de estos años».