Del 14 al 18 de agosto, los hermanos franciscanos capuchinos vivieron su asamblea fraternal en la Parroquia “Cristo Salvador” de Chama, en el distrito de Surco. Este año, el encuentro anual se desarrolló en el marco de los 75° años de presencia en el Perú, y estuvo marcada por dos momentos especiales: la Eucaristía junto a toda la comunidad y delegaciones de las fraternidades y la romería; y la Santa Misa en el Cementerio de Chorrillos, recordando a los hermanos que dieron su vida en estas tierras.
Asamblea anual y temas de formación
La Asamblea fraternal de los hermanos franciscanos capuchinos se desarrolló, en sus primeros días, con el abordaje de diferentes temas de formación permanente, algunos propios del carisma y otros abocados al trabajo pastoral y vocacional. También se dio espacio para la evaluación del camino avanzado en la Iglesia durante estos años.
Han pasado casi 75 años desde que un 25 de septiembre de 1948, seis hermanos provenientes de la Provincia capuchina de Génova, Italia, llegaron al Perú a pedido del Nuncio Apostólico de esa época (Monseñor Fernando Cento). Estos seis hermanos fueron: León Benavides, Casimiro Cánepa, Emerico Repetto, Donato Gabella, Domingo Capponi y Juan Benito.
Desde entonces, los hermanos desplegaron una gran labor pastoral, primero en Chorrillos, luego en Chama, en Paramonga al norte de Lima, en la Mejorada en Huancavelica y en Arequipa. De igual modo, sirvieron en las zonas misioneras de la selva, en el Estrecho y alrededores. Cabe destacar también la obra llamada “Ciudad de los Niños”, que se mantiene hasta el día de hoy y que inició cuando San Juan de Miraflores era solo un arenal.
En los días de la asamblea se recordó todo el trabajo de los primeros hermanos franciscanos capuchinos en el Perú, sobre todo, su fidelidad al carisma y empeño en seguir las indicaciones del Concilio Vaticano II.
Hace quince años, el gobierno general de la Orden pidió a la ya Provincia peruana, que llevase el carisma capuchino a la vecina Bolivia, único país de la región que no contaba con la presencia capuchina.
Misa por aniversario
Uno de los momentos más especiales tuvo lugar el pasado jueves 17 de agosto, con la Eucaristía en acción de gracias por los 75 años de presencia en el Perú. La misa contó con la presencia de los obispos auxiliares de Lima: Monseñor Ricardo Rodríguez y Monseñor Juan José Salaverry.
La Eucaristía fue presidida por Monseñor Salaverry en su calidad como Delegado del Arzobispo de Lima y Presidente de la Comisión episcopal para la Vida consagrada. En su homilía, el obispo auxiliar destacó algunos puntos del recorrido realizado por los franciscanos capuchinos, haciendo hincapié en la fraternidad y la entrega apostólica de todos los hermanos.
Monseñor Juan José agradeció, en nombre de la Iglesia del Perú, al hermano Luca Simoncini, actual Provincial de Génova, el haber respondido positivamente hace 75 años a ese llamado, que con el tiempo se ha revelado fructífero, con la gracia de Dios.
Luego de la celebración, los hermanos participaron de un breve homenaje preparado por la comunidad parroquial, con algunos números artísticos, la lectura de una breve reseña y un brindis de honor.
En memoria de los que partieron
Finalmente, en el último día de Asamblea, los hermanos franciscanos capuchinos se congregaron en el Cementerio de Chorrillos para celebrar la Misa de Clausura. En la Eucaristía se agradeció a Dios por la vida de todos los hermanos que han pasado en estos 75 años, entregando generosamente su vida en estas tierras.