En este Tercer Domingo de Adviento, nuestra «Corona misionera» llegó hasta El Agustino, para recoger el testimonio de nuestros ancianos de la Comunidad «Abuelitos brillantes».
«Dejémonos llevar por su Espíritu y abramos un poquito el corazón para escucharnos, para entendernos, para vivir sin desesperación», es el mensaje que nos dejan los abuelitos de la Parroquia Santa Magdalena Sofía Barat.
Al llegar el domingo de la alegría, nuestros ancianos de la Comunidad «Abuelitos brillantes», nos recuerdan que «Dios se hizo Niño como el niño que alguna vez fuimos». Por eso, ellos nos llaman a preparar la venida del Señor «con paso firme y seguro».
«Encendemos esta tercera vela para compartir la alegría de la vida. El Señor viene para irradiar su Luz en todos los rincones del mundo», es la reflexión que se aprecia en el videomensaje de esta nueva semana de Adviento.
En el camino del Adviento, recibamos el don gratuito de la vida y demos testimonio del Señor compartiendo con los demás.
En otros momento, nuestros ancianos afirmaron que «el Espíritu de Dios vive en nosotros, pulula en nuestro pueblo, nace desde lo más recóndito y crece en cada hombre y mujer. Danza en nuestras plazas y sube a nuestros cerros».
Dejémonos interpelar por la voz de nuestros abuelos y abuelas, aprendamos a compartir y promover el diálogo entre generaciones, a valorar su experiencia y sabiduría para mirar el futuro con esperanza.