Más de 1000 personas, entre docentes y directores de instituciones educativas, representantes de las distintas ODEC y UGEL, se dieron cita en el Instituto Superior de Estudios Teológicos (ISET) Juan XXIII para participar del II Foro Educativo “Desafíos de las políticas educativas en el Perú frente a la crisis global de los aprendizajes”, organizado por la Oficina de Educación Católica – ODEC Lima.
Entre los panelistas, destacaron distinguidas autoridades académicas como el Dr. Carlos Garatea Grau, Rector de la Pontificia Universidad Católica del Perú; la Dra. Gloria Helfer, ex ministra de Educación; el Dr. Alfonso López Chau, Rector de la Universidad Nacional de Ingeniería; y el Mg. Richard Rubio Guerrero, ex director de Gestión Pedagógica de la DRELM.
Monseñor Salaverry: «La Iglesia también es responsable del proceso educativo»
Al inicio de la jornada, Monseñor Juan José Salaverry señaló que este segundo encuentro de formación y reflexión sobre la labor educativa es una prioridad para la Iglesia y el Estado.
«La Iglesia de Lima se siente responsable, junto con la familia y el Estado, del proceso educativo de los jóvenes y niños a quienes atendemos. Al asumir esta doble responsabilidad, creyentes y ciudadanos, no podemos desconocer el proceso cultural, social presente en el mundo postmoderno en el cual nos toca asumir estos desafíos que nos retan a esbozar estrategias actualizadas en favor de la niñez y la juventud», afirmó el obispo.
Carlos Garatea: «La educación trabaja con el futuro»
Durante su ponencia, el Dr. Carlos Garatea sostuvo que el centro de la educación está siempre en la persona, por lo que uno de los desafíos más apremiantes en la educación global tiene que ver con la evolución de las máquinas y la inteligencia artificial. Del mismo modo, los efectos de la Pandemia han generado que los docentes se enfrenten a estudiantes con un perfil diferente a los que conocimos hace 10 o 15 años.
Para lidiar con estos retos, es importante desarrollar «un proceso de carácter pedagógico, de consideración y acercamiento a nuestros estudiantes». El rector de la PUCP explicó que la dificultad para la concentración de los estudiantes, la agudización de problemas de sociabilidad, así como los problemas de salud mental, son algunas de las consecuencias que desafían a la educación global.
«La primera manera de resolver un problema es ponerlo sobre la mesa, llamarlo por su nombre. A partir de ahí, tenemos que pensar juntos cómo resolver y encarar esta situación que compromete el futuro de nuestro país», sostuvo Garatea.
En otro momento, se reflexionó sobre la importancia de «recuperar la escucha y el diálogo» con los estudiantes, sobre todo, cuando ocurren discrepancias. La experiencia intercultural, el arte y el deporte, el sentido crítico, son algunos de los aspectos más relevantes que deben primar en el proceso pedagógico.
Al término de la ponencia, se desarrolló un espacio propositivo de trabajo grupal con los docentes y directores presentes. Durante la presentación de los panelistas invitados, la educadora y política peruana, Gloria Helfer, señaló que la la educación liberadora es el camino para enseñar a pensar críticamente a los estudiantes. Por eso, la vocación del maestro es un instrumento para construir una educación que hermana hacia la sinodalidad.
En tanto, el Dr. Alfonso López Chau, rector de la Universidad Nacional de Ingeniería, manifestó que es necesario promover el liderazgo desde las escuelas, a fin de «tomar lo mejor que existe en cada persona y fermentar sus capacidades».
Monseñor Cornejo: «La educación es para todos»
Por su parte, Monseñor Guillermo Cornejo destacó la importante labor que realizan las autoridades y profesores de las instituciones educativas: «Su función es clave y fundamental para sacar adelante nuestro país.
La educación es para todos, de manera muy especial, para los que más sufren, para los pobres, para los que pasan dificultades, para los que merecen una oportunidad.
Monseñor Cornejo aseguró que todos estamos llamados a ejercer nuestra vocación «con el corazón», para «dar la vida por nuestros estudiantes».
Al término del foro educativa, Sixto Galindo, director general de ODEC Lima, agradeció a los ponentes, directores de AIEC, directores de colegios públicos y privados, docentes y coordinadores, por su asistencia.
Y haciendo eco de las palabras del Papa Francisco, Galindo recordó que la educación es, ante todo, un acto de esperanza. «Continuemos asumiendo nuevos compromisos en favor de la educación de nuestro país. La experiencia y el aporte de todos permitirá que podamos asumir, desde una perspectiva crítica y constructiva, los caminos que debemos seguir para fortalecer nuestra labor pedagógica», añadió.
Desde el lugar donde estemos, generemos espacios de reflexión que nos permitan establecer compromisos concretos para avanzar hacia una educación más equitativa y de calidad.
SIXTO GALINDO