Este domingo 14 de febrero, celebramos el ‘Día del Amor y la Amistad’, fecha que nace en honor a San Valentín, Patrón de los enamorados y de los matrimonios. Pero también un día para celebrar la amistad y la fraternidad. En ese sentido, el Padre Manuel Morales, responsable de la Pastoral Familiar de nuestra Arquidiócesis de Lima, comparte una breve reflexión para profundizar el sentido del amor en nuestras vidas:
El Padre Morales explica en su reflexión que el amor “busca lo mejor para la persona amada, que sea feliz, libre, responsable, consciente de su vida», sin embargo, a veces los seres humanos «tendemos a cosificar a las personas».
Manuel Morales también precisó que no debemos confundir amor de manipulación, dos cosas opuestas: «a veces entendemos el amor como algo físico, externo, como son los regalos, las salidas, las comidas, incluso los besos y lo sexual. Cuando hay violencia o maltrato no hay amor, cuando manipulo a la otra persona no hay amor, lo que hay es un vínculo tóxico, enfermo», añadió.
La meditación de hoy es una invitación a recordar que el amor se siembra en el corazón, con cariño y delicadeza: «eso es el amor, es pensar en el otro, en buscar el bien de la persona amada», dijo el Padre Manuel.
El amor se manifesta escuchando, atendiendo, mirando y sirviendo. Amor es buscar el bien de la persona amada y ayudarla a que sea una persona plena, viva su vida en plenitud.
En otro momento, el Padre Manuel manifestó que el Señor nos ha enseñado el mayor gesto de amor: dar la vida por los demás. Por eso, estamos llamados a actuar en servicio de los demás, a amar al prójimo como a uno mismo:
«Amar es también entregarse. No entregar cosas, sino entregarme a la persona que amo. Déjale a Jesucristo que te acompañe en el camino del amor, este camino que Tú nos has dado en el Evangelio», reflexionó.
¿Sabías qué?
San Valetín fue un obispo que casaba a las parejas en secreto a fin de salvaguardar el sacramento del matrimonio durante el gobierno del emperador Claudio II en el siglo III. En ese sentido, al ser descubierto, fue encarcelado y finalmente ejecutado un 14 de febrero del año 270 d.C.
A poco de iniciarse el Tiempo de Cuaresma, y ante la imposibilidad de acudir a los templos por el confinamiento obligatorio, la Arquidiócesis de Lima presenta el ‘Rito de Imposición de la Ceniza hecha por laicos’, un documento que guiará a toda la familia para participar de la Misa del Miércoles de Ceniza.
¿En qué consiste el Rito de Imposición de Ceniza para hacer en casa?
Se trata de una alternativa para el Rito de Imposición de Ceniza que suele realizarse durante la Celebración Eucarística del Miércoles de Ceniza. Para este caso especial, se puede designar a uno o varios miembros del grupo familiar.
Como se indica en el video-guía elaborado por el decanato 3 de nuestra Arquidiócesis, para conseguir ceniza podemos usar carbón y molerlo con la ayuda de un martillo:
En el siguiente documento, puedes descargar la Guía del Rito de Imposición de Ceniza hecha por un laico:
Cómo participar desde casa de la Misa del Miércoles de Ceniza.
Como es sabido, la cuarentena decretada por el gobierno impide que los fieles podamos participar presencialmente de las misas en nuestras Parroquias. Por esta ocasión excepcional, los invitamos a conectarse a las redes sociales de cada Parroquia de la Arquidiócesis de Lima.
De igual manera, en la Página de Facebook del Arzobispado de Lima, puedes participar desde casa de la Celebración Eucarística que presidirá Monseñor Carlos Castillo este miércoles 17 de febrero a las 19:00 horas.
Al acercarnos al Tiempo de Cuaresma, compartimos esta hermosa reflexión compuesta por Alexis Valdés. El poema ‘Esperanza’ es una meditación que nos invita a vivir este tiempo de incertidumbre y enfermedad con una luz de esperanza, aprendiendo a volver nuestra mirada a Jesús, encontrándolo en el rostro del que más sufre.
Esperanza
Escrito por: Alexis Valdés Voz: René Durán Edición: Juan Bytton SJ.
Cuando la tormenta pase y se amansen los caminos, y seamos sobrevivientes de un naufragio colectivo, con el corazón lloroso y el destino bendecido, nos sentiremos dichosos tan sólo por estar vivos.
Y le daremos un abrazo al primer desconocido, y alabaremos la suerte de conservar un amigo. Y entonces, recordaremos todo aquello que perdimos. de una vez aprenderemos todo lo que no aprendimos, y no tendremos envidia, pues todos habrán sufrido y no tendremos desidia, seremos más compasivos
Valdrá más lo que es de todos que lo jamás conseguido, seremos más generosos y mucho más comprometidos, entenderemos lo frágil que significa estar vivos, sudaremos empatía por quien está y quien se ha ido.
Extrañaremos al viejo que pedía un peso en el mercado, que no supimos su nombre y siempre estuvo a tu lado. Y quizás el viejo pobre era tu Dios disfrazado, Nunca preguntaste el nombre porque estabas apurado.
Y todo será un milagro, y todo será un legado, Y se respetará la vida, la vida que hemos ganado. Cuando la tormenta pase, te pido Dios, apenado, que nos devuelvas mejores, como nos habías soñado.
Continuando con las acciones solidarias que organizan las comunidades de laicos de las Parroquias de nuestra Arquidiócesis, hoy compartimos los testimonios de solidaridad de nuestros hermanos de la Parroquia Nuestra Señora de la Reconciliación, la Parroquia San Juan María Vianney y la Parroquia Jesús Nazareno.
Parroquia Nuestra Señora de la Reconciliación: apoyo a 130 ollas comunes.
El Padre Juan Carlos Riva, en colaboración con la comunidad parroquial Nuestra Señora de la Reconciliación, en La Molina, vienen planificando entregas de donativos y víveres para nuestros hermanos más necesitados.
En ese sentido, Yuriko Kumura, encargada de la Pastoral Solidaria de la Parroquia, nos comentó que estos gestos se inspiran a partir de la falta de trabajo e ingresos económicos en muchas familias el barrio del AA. HH Matazango.
Pero este fue solo el punto de partida. Posteriormente, los jóvenes se pusieron de acuerdo para trabajar gratuitamente y llevar alimentos a las zonas más afectadas de Pamplona Alta, en San Juan de Miraflores. En total se han distribuido más de 1000 kilos de alimentos de primera necesidad, beneficiando a alrededor de 130 ollas comunes.
Yuriko Kumura adelantó que la comunidad parroquial continuará brindando este servicio desinteresado. Todos los interesados en enviar sus donaciones de víveres y menestras solidarias, pueden comunicarse a los teléfonos (01) 437-3945 o (01) 435-8494 de lunes a viernes de 9:30 am. a 3:30 pm.
Parroquia San Juan María Vianney: Rezo del Santo Rosario todos los sábados por redes sociales.
La Parroquia San Juan María Vianney, del distrito de Magdalena, a través de la Pastoral Familiar, nos invita a participar del Rezo del Santo Rosario en especial intención por todos nuestros enfermos. Cada sábado, desde las 09:00 am., puedes unirte desde casa a través de su página de Facebook (clic aquí).
El Párroco Juan Carlos Valverde explicó que esta iniciativa nació gracias a la preocupación de un grupo de cinco familias que decidieron aprovechar las redes sociales para rezar el Rosario: «en el camino, fueron uniéndose cada sábado más familias, y ahora son un promedio de 40 familias que se conectan desde casa y rezan los misterios», indicó.
Parroquia Jesús Nazareno: conversatorios virtuales y Catequesis 2021.
Buscando dar soporte emocional a las familias, el Padre Nivaldo Feliciano, Párroco de la Parroquia Jesús Nazareno (Cercado de Lima) y Director de la Pastoral de Movilidad Humana de la Conferencia Episcopal Peruana, viene liderado una serie de conversatorios y talleres para dar soporte emocional a las familias.
Asimismo, la Parroquia ha iniciado un proceso de inscripción para el periodo de Catequesis Virtual 2021, dirigido a niños, jóvenes, adultos y familias (más información en la página de Facebook).
Los dos nuevos obispos auxiliares de la Arquidiócesis de Lima, Monseñor Guillermo Cornejo y Monseñor Juan José Salaverry, recibieron el saludo del Clero de Lima, los grupos religiosos y las comunidades de laicos, en una reunión virtual.
Durante la presentación, Monseñor Carlos Castillo expresó su agradecimiento al Santo Padre por esta importante designación que amplía la cuota dos obispos auxiliares a cuatro: «el Papa Francisco ha tenido la delicadeza de seguir inspirándose en la experiencia pastoral de los párrocos para dirigir la Iglesia», indicó.
El Arzobispo resaltó que, durante los últimos dos años, se ha desarrollado un proceso de acompañamiento y diálogo con el equipo de vicarios para la toma de decisiones de nuestra Iglesia de Lima. Ahora, con la llegada de dos nuevos obispos, «será posible una mejor distribución de las zonas de nuestra diócesis para que cada obispo pueda encargarse de un grupo, manteniendo el espíritu común de servicio, cercanía y amistad».
Y dirigiéndose a Monseñor Cornejo y Monseñor Salaverry, agregó: «Quiero expresarles la alegría de acogerlos con el corazón, con alegría y con esperanza. Gracias por aceptar esta misión».
Monseñor Cornejo: «Siempre me acompañaron los pobres».
Monseñor Guillermo Cornejo manifestó su entusiasmo por su llegada a la Arquidiócesis de Lima: «Mi vocación ha sido muy sencilla y linda. He participado en Parroquia, he sido acólito, he participado en grupos juveniles, y en todo mi caminar, me he cruzado mucho con el prójimo, especialmente con los más pobres, los humildes y los sencillos», señaló.
En ese sentido, Monseñor Cornejo compartió su experiencia pastoral en las cárceles de nuestra ciudad y otros grupos humanos: «desde que era seminarista he tenido un trabajo cercano con los que más sufren en las cárceles, también con nuestros ancianos abandonados, con los forasteros, con la gente que pasa hambre».
Me siento feliz de haber tenido estas maravillosas experiencias en nombre del Señor. Espero trabajar con mucha humildad y sencillez, estoy dispuesto a asumir lo que el Señor me pida.
Lema de Monseñor Cornejo: «¿Cuándo Señor te vi hambriento, sediento, enfermo, en la cárcel, forastero y desnudo? Cuando lo hiciste con mis hermanos más pequeños, lo hiciste conmigo».
Guillermo Cornejo explicó que eligió este lema a partir de su experiencia de vida en las Parroquias y comunidades: «siempre me acompañaron los pobres, las mujeres golpeadas y personas encarceladas, siempre he tenido ese encuentro con los que más sufren. Hoy necesitamos tener mucho amor y fe, mucha esperanza y caridad, y a eso me siento invitado con este nombramiento», acotó.
Monseñor Salaverry: «Volver la mirada y el corazón hacia Dios».
Por su parte, Monseñor Juan José Salaverry comentó que recibió la noticia de su designación con alegría y nerviosismo: «reconozco las propias limitaciones y siento que la gracia tendrá que suplir para podernos ayudar en esta tarea», expresó emocionado.
Salaverry recordó su experiencia en el servicio de la vida religiosa y la formación académica, dos pilares fundamentales para asumir este nuevo desafío: «estas experiencias fueron una parte importante en la vida de nuestra Arquidiócesis y es parte de la riqueza de la vida de la Iglesia», dijo.
Y dirigiéndose a todos los miembros del clero, acotó: «Cuento con la ayuda de todos ustedes, clero de Lima. Recibo este encargo desde el espíritu de mi padre fundador, Santo Domingo de Guzmán, que fue un servidor de la Iglesia. También le pido a Jerónimo de Loayza, Primer Arzobispo de Lima, que interceda por este ministerio que se me confía».
Quiero trabajar en comunión con ustedes, en comunión con nuestro Arzobispo y obispos auxiliares. Tenemos que hacer un equipo para ponernos al servicio de la Iglesia.
Lema de Monseñor Salaverry: «La misericordia y la verdad no te falten jamás».
Juan José Salaverry explicó que vivimos tiempos difíciles, y ahora que la «humanidad vuelve la mirada y el corazón hacia Dios», necesitamos que la Iglesia «haga presente el mensaje de esperanza y cercanía de Jesucristo que camina, nuevamente, por las calles del mundo para perdonar, para sanar, para tejer lazos de comunión entre los hombres».
En este contexto, Monseñor Salaverry ha elegido su lema «confiando en la gracia» y sabiendo que «la misericordia va a actuar sobre la humanidad y también sobre mi».
Como se sabe, con esta nueva designación del Papa Francisco, será la primera vez que nuestra Arquidiócesis Metropolitana de Lima cuente con cuatro auxiliares. Los dos obispos actuales son Monseñor Ricardo Rodríguez y Monseñor Guillermo Elías.
Al conmemorarse el Día de la Jornada Mundial del Enfermo, Monseñor Guillermo Elías presidió la Celebración Eucarística en especial intención por todos nuestros enfermos a causa de la Pandemia. La Santa Misa, celebrada en la Parroquia San Juan Apóstol, fue transmitida por las redes sociales.
Comentando el Evangelio de San Marcos (7,24-30), que narra el pasaje de una mujer fenicia y su hija poseída por un espíritu, Monseñor Elías señaló que las lecturas de hoy nos muestran la fe de la madre en Jesús: “el dolor y el amor la llevan a pedir con insistencia», indicó el Obispo.
Monseñor Guillermo explicó que ese mismo amor maternal, nos impulsa hoy a unirnos espiritualmente para orar por nuestros enfermos, voluntarios, laicos, médicos y enfermeras: «el dolor y el amor los llevan a pedir con insistencia sin tener en cuenta desprecios, ni retrasos ni indignación”, agregó.
Guillermo Elías indicó que muchos de nosotros nos encontramos como esta mujer, cargados de dolor y clamando por la vida de nuestros familiares enfermos, acudiendo a Dios con insistencia para que salve a nuestros seres queridos:
“El Señor nos conmueve y mueve a seguir rezando, usando la oración de petición por nuestros hermanos, que expresa amor, esperanza, porque un clamor de fe, nunca será desentendido, Dios nunca deja de escucharnos y siempre quiere nuestro bien”, precisó.
Sigamos acudiendo a Dios con fe, preguntándonos cómo nos ayudará esta situación, porque ya no somos los mismos, estamos llamados a ser mejores y a crecer como humanidad.
Finalmente, el Obispo Auxiliar de Lima remarcó el poder de la oración de intercesión o petición: «así como la mujer fenicia vio el poder de Dios, este también actúa a través de otros, como es el caso de los médicos, enfermeras, personal de salud, voluntarios, laicos, sacerdotes y a todos en general, porque ellos han podido mirar el rostro de Cristo en el hermano enfermo», puntualizó.
Las Parroquias de nuestra ciudad continúan organizándose para recaudar víveres y menestras solidarias en favor de las familias más afectadas por la Pandemia. Hoy queremos dar a conocer las acciones solidarias y testimonios de nuestras comunidades parroquiales para compartir víveres, ropa y medicamentos.
¡Estos son los avisos parroquiales de la semana!
Solidaridad con más de 1900 familias.
La Parroquia Santa Rita de Casia, ubicada en el distrito de Miraflores, es una de las comunidades que viene colaborando con más de 70 ollas comunes. A la fecha, la Parroquia ha brindado apoyo a más de 1900 familias de los distritos de San Juan de Miraflores, Villa María del Triunfo, Manchay y Villa el Salvador.
Apoyo a cunas y comedores populares.
Y en el distrito de El Agustino, la comunidad de la Parroquia Santa Magdalena Sofía Barat se ha organizado para ayudar a las cunas y los comedores populares de su sector, llevando todo tipo de víveres para que puedan preparar sus alimentos.
Gracias a estas dos parroquias, ahora nuestros ancianos más necesitados cuentan con el valioso acompañamiento de los jóvenes voluntarios para recibir útiles de aseo y medicamentos.
Cómo apoyar a los centros de acopio parroquiales.
Por otro lado, queremos recordarte que todas las Parroquias de la Arquidiócesis de Lima vienen operando como centro de acopio para recibir las donaciones de víveres y menestras.
Solo tienes que acercarte a tu Parroquia más cercana para dejar tu donación. Ttambién puedes comunicarte con Cáritas Lima llamando al (01) 203 7700 (Opción 1) de lunes a viernes 8:30am. a 1:00pm. / 2:00pm. a 5:00pm.
Oremos por nuestros enfermos de la Pandemia.
Hoy que celebramos la Jornada
Mundial del Enfermo, hagamos un esfuerzo para hacer de nuestra Iglesia un
“hospital de campaña” que acompañen a nuestros hermanos más vulnerables por la
crisis sanitaria.
Oremos por todas las personas que sufen el Covid-19 y otras enfermedades. Oremos también por nuestros médicos, enfermos y voluntarios que entregan su vida al servicio de los demás.
El confinamiento por la segunda ola del Covid-19 es una realidad y, ante ello, cientos de familias se han visto con serias dificultades para sostener sus recursos básicos de alimentación y servicios. Por otro lado, el temor a ser contagiado o la imposibilidad de compartir con la familia y amigos, viene provocando cuadros de decaimiento en las familias, en especial, de los más pequeños de la casa.
En ese sentido, las parroquias de nuestra Arquidiócesis vienen organizándose en comités para atender y colaborar con nuestros hermanos más necesitados. Este es el caso de la Parroquia Santa Rita de Casia, ubicada en el distrito de Miraflores.
Ollas comunes para más de 1900 familias.
Conversamos con Diana Caldas Vela, secretaria del Consejo de la Parroquia Santa Rita de Casia, quien nos comenta que la comunidad parroquial, bajo el liderazgo del Padre Ignacio Reinares, vienen colaborando con diferentes iniciativas solidarias para acompañar a las familias más afectadas:
“Desde junio hasta la fecha, venimos acompañando a 76 ollas comunes, lo que representa un gran apoyo a más de 1900 familias correspondientes a los distritos de San Juan de Miraflores, Villa María del Triunfo, Manchay y Villa el Salvador, a quienes se les brinda semanalmente apoyo con víveres y utensilios para la preparación de sus alimentos”, expresó Caldas Vela.
Al llegar a las comunidades más pobres, el Consejo Parroquial pudo constatar que las familias padecían otras necesidades y carencias de servicios básicos como luz, agua y desagüe: «por si fuera poco, muchos niños sufrían de anemia y teníamos ancianos sin recibir sus medicamentos. Fue así que la comunidad parroquial se organizó con los dirigentes vecinales para hacer un empadronamiento y recaudar medicamentos, suplementos vitamínicos, alimentos nutritivos altos en hiero, y pañales para los abuelitos. También logramos reunir ropa, calzado y lo necesario para darle dignidad a estas familias”, señaló Diana.
Las acciones solidarias de la Parroquia Santa Rita de Casia, han ido de la mano con la labor de evangelización: “En algunos lugares, nuestros hermanos no sabían rezar y no conocían a la Virgen. Por eso, les hemos contado sobre nuestra Madre y su amor infinito. Hoy, ellos mismos rezan el Santo Rosario», acotó.
Con esta designación del Papa Francisco, será la primera vez que nuestra Arquidiócesis Metropolitana de Lima cuente con cuatro auxiliares. Los dos obispos actuales son Monseñor Ricardo Rodríguez y Monseñor Guillermo Elías.
Nombramiento de obispos auxiliares de la archidiócesis metropolitana de Lima.
El Santo Padre ha nombrado obispos auxiliares de la archidiócesis metropolitana de Lima (Perú):
-Rvdo. Guillermo Antonio Cornejo Monzón, del clero de la diócesis de Lurín, asignándole la sede titular de Decoriana, hasta ahora párroco del Niño Jesús, vicario foráneo de la Foranía II y responsable de la pastoral penitenciaria y de la tercera edad;
-Rvdo. P. Juan José Salaverry Villarreal, O.P., asignándole la sede titular de Asolo, hasta ahora rector del Instituto Superior de Estudios Teológicos Juan XXIII-ISET y vicario episcopal para la vida consagrada en la archidiócesis metropolitana de Lima.
Sobre Monseñor Guillermo Antonio Cornejo.
S.E. Monseñor Guillermo Antonio Cornejo Monzón nació el 1 de noviembre de 1964 en Piura. Ingresó en el Seminario Santo Toribio de Mogrovejo y obtuvo la licenciatura en filosofía y teología en la Facultad Pontificia y Civil de Teología de Lima.
Fue ordenado sacerdote el 8 de diciembre de 1994, incardinado en la archidiócesis metropolitana de Lima; posteriormente pasó al clero de la nueva diócesis de Lurín, desmembrada de la archidiócesis metropolitana de Lima, el 14 de diciembre de 1996.
Ha desempeñado los siguientes cargos: párroco de La Anunciación (1994-2006); consejero diocesano de Pastoral Vocacional (1994-2001); responsable de la zona pastoral II de ls Forania II (2002-2008); consejero diocesano de Pastoral Juvenil (2004-2010); responsable del equipo diocesano de animación pastoral (EDAP) (2009-2013); responsable general del área diocesana de evangelización (2015-2018).
Hasta ahora ha sido párroco del Niño Jesús, vicario foráneo de la Forania II y responsable de la pastoral penitenciaria y de la tercera edad.
Sobre Monseñor Juan José Salaverry Villarreal, O.P.
S.E. Monseñor Juan José Salaverry Villarreal, O.P., nació el 2 de septiembre de 1969 en Lima. Realizó sus estudios primarios y secundarios en el Colegio Nuestra Señora de La Merced de Lima. Ingresó en la Orden de los Padres Dominicos, y completó sus estudios filosóficos y teológicos en la Facultad de Teología Pontificia y Civil de Lima. En 2007 se licenció en Derecho Canónico en la Universidad de Salamanca (España).
Hizo su primera profesión religiosa el 11 de marzo de 1997 y fue ordenado sacerdote el 7 de octubre de 2000.
Ha desempeñado los siguientes cargos: vicemaestro de novicios de la Provincia Dominicana de San Juan Bautista (2000-2003), pesidente de los Superiores Mayores de América Latina (2010-2014); prior provincial del Orden Dominico en Perú (2010-2014); maestro de estudiantes dominicos en el Convento de San Alberto Magno (2018-2020); asistente de la Federación de monjas dominicas en Perú (2018-2020).
Hasta la fecha, ha sido rector del Instituto Superior de Estudios Teológicos Juan XXIII-ISET y vicario episcopal para la vida consagrada en la archidiócesis metropolitana de Lima.
En una entrevista concedida al canal RPP, Monseñor Carlos Castillo señaló que la llegada del primer lote de vacunas contra la Covid-19 es una noticia que llena de alegría y esperanza, porque es un inicio para vencer definitivamente al virus SARS-CoV-2. «Es un proceso lento, pero importante», manifestó.
«Es una luz de esperanza. Es un momento importante para recobrar ánimos porque empezamos a vencer al virus», con estas palabras el Arzobispo de Lima compartió su entusiasmo ante la llegada del primer lote de vacunas para inmunizar a todo el personal de salud del país.
Monseñor Carlos expresó su agradecimiento y felicitó la actitud solidaria que tenemos los peruanos para vivir en hermandad y socorrer al más necesitado en estos tiempos de dificultad: «nosotros mismos en la Iglesia hemos experimentado cómo han llegado inmediatamente los alimentos a las Parroquias para distribuirlos. Todos nos estamos movilizando, todos queremos hacer algo, evidentemente con los cuidados adecuados», agregó.
En otro momento, el prelado hizo un llamado a la unidad nacional para frenar la segunda ola de contagios: «las cosas se consiguen si nosotros nos ponemos de acuerdo y nos animamos todos a colaborar, no se consiguen cuando empezamos a quejarnos, o en vez de dar soluciones ponemos trabas, eso no ayuda. Es mejor poner todos el hombro», comentó.
Monseñor Castillo también invitó a todos los peruanos a reaccionar contra las fake news sobre la vacuna anticovid-19: «En las redes se lanza o se dice cualquier cosa como verdadero, y se crean prejuicios. Yo invito a todos que reaccionemos contra las fake-news y vayamos a leer artículos interesantes. Este es un tiempo muy bueno para informarse bien, para madurar, para comprender las cosas con precisión», remarcó.
En ese sentido, el Primado del Perú, saludó que el Presidente de la República, Francisco Sagasti, sea el primero en vacunarse como una demostración de que la inmunización es la mejor protección frente a la Pandemia: «Y lo mismo ha hecho el Papa Francisco en el Vaticano. Tenemos que quitar los mitos. La ciencia es un vehículo excelente para amar si es que se hace con fines verdaderos y buenos como en este caso», explicó.
Primer lote de dosis de vacunas contra el Covid-19.
Como se sabe, la noche del 7 de febrero, arribó a nuestro país el primer lote de 300 mil dosis de vacunas, en el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez. «Este es el comienzo de una tarea larga y difícil, que no solo es un desafío nuestro, sino para todo el mundo. Hemos venido avanzando a paso firme y con tranquilidad, demostrando que somos un Gobierno que da tranquilidad y dice las cosas como son», declaró el Presidente Francisco Sagasti.
Las 700 mil vacunas restantes del primer lote, llegarán previsiblemente el 14 de febrero. La distribución de las vacunas se iniciará desde el lunes 8 en 13 hospitales e institutos de salud de Lima y Callao, a fin de proteger al personal de las áreas críticas que combate la Pandemia.
