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En el marco de la 109 Jornada Mundial del Migrante y el Refugiado, y a la luz de lo que el Papa Francisco nos propone en su mensaje “Libres de elegir si migrar o quedarse”, se llevó a cabo un encuentro de Diálogo y Reflexión con el fin de generar una identificación y sensibilización sobre el fenómeno de la Movilidad Humana en el Perú.

El evento, que tuvo lugar en el ISET “Juan XXIII”, fue una iniciativa de la Asociación de los Misioneros de San Carlos Scalabrinianos, con la participación conjunta de la Conferencia de Religiosas y Religiosos del Perú (CONFER) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). También estuvo presente nuestro obispo auxiliar de Lima, Monseñor Juan José Salaverry.

Entre los ponentes estuvieron: la Dra. Marisol Pérez Tello, el R.P Juan Antonio Nureña, el Ing. Jorge Baca Vaughan, el Dr. Eliecer Coronel, el R.P Sidnei Domelas, CS, el R.P Luiz Do Arte, CS, entre otros.

Este encuentro de diálogo parte de una lectura Teológica Pastoral sobre los migrantes y refugiados en el Pontificado del Papa Francisco, con el objetivo de promover un espacio de reflexión sobre un derecho aún no codificado a nivel internacional: el derecho a no tener que emigrar, es decir, el derecho a permanecer en su propia tierra.

Entre los momentos más importantes, destacó el testimonio de nuestros hermanos migrantes, quienes compartieron sus experiencias y contribuyeron a la causa de reflexión sobre el proceso migratorio a la luz de la fe.

Como segunda parte del encuentro, se reflexionó sobre la condición de las personas que no tienen el derecho de “elegir si migrar o quedarse”, es decir, las personas obligadas a salir de su tierra para salvar su vida: los refugiados.

A partir de estas diversas miradas, se concluyó el encuentro con la propuesta de la Iglesia desde las Directrices Pastorales para la movilidad humana, reafirmando el compromiso de ponerse en el camino hacia una Iglesia Sinodal.

Del 21 de septiembre al 13 de octubre, estará disponible para el público una exposición sobre la vida y misión episcopal de Monseñor Emilio Lissón Chávez, quien fuera el XXVII arzobispo de Lima de nuestra historia, entre 1918 y 1931.

La ceremonia de inauguración contó con la presencia de familiares del arzobispo emérito, además de otras autoridades eclesiásticas, entre ellas, Monseñor Carlos Castillo, arzobispo de Lima y Primado del Perú; Kelly Montoya, directora del Archivo Arzobispal; el Padre José Antonio Ubillús, Presidente de la Comisión Arquidiocesana de Fe y Cultura; y el Padre Jesús García Matta, Superior de la Congregación de la Misión en el Perú.

Con esta actividad, la Comisión Arquidiocesana de Fe y Cultura anunció el inicio de un ciclo de exposiciones en el Palacio Arzobispal de Lima sobre los procesos de beatificación que se hayan iniciado recientemente o reiniciado. La muestra inaugural corresponde a una exposición sobre la vida de Monseñor Emilio Lissón, abierta al público de lunes a viernes de 2:00 a 4:30 pm y los sábados de 11:00 am a 2:00 pm (hasta el 13 de octubre).

«Invitamos a todas las congregaciones que tengan un proceso de beatificación a contactarse con la Comisión de Fe y Cultura, que gustosamente, durante un año, tenemos el Palacio Arzobispal a disposición de todos ustedes», expresó Kelly Montoya, directora del Archivo Arzobispal de Lima.

Por su parte, el presidente de la Comisión Arquidiocesana de Fe y Cultura, Padre José Antonio Ubillús, recordó los esfuerzos de Monseñor Raimundo Reboredo como vicepostulador de la causa de beatificación de Monseñor Lissón. «También quiero agradecer al Padre Francisco Domingo, que sacó del olvido a Monseñor Lissón y propuso que se investigara sobre su vida. Finalmente, agradecer al Padre Corpus Juan Delgado, quien redactó la Positio con mucha dedicación e inteligencia; y este documento ya ha sido presentado al Dicasterio de las Causas de los Santos en Roma y estamos a la espera de que se apruebe», comentó.

«Para que la causa de Monseñor Lissón avance, es necesario que la fama de santidad esté respirándose aquí, en Lima. La vida de Emilio Lissón estuvo marcada por la sinceridad, la transparencia, la sencillez y la humildad», manifestó el Padre Jesús García Matta, Superior de la Congregación de la Misión en el Perú.

En su alocución, Monseñor Castillo explicó que, a través de esta exposición, comienza un proceso de pastoral cultural distinta. Por ello, el propósito de esta iniciativa promovida por la Comisión de Fe y Cultura, es que «recuperemos nuestra historia y tengamos un relato significativo que nutra nuestra conciencia y ayude a que nuestra fe sea comprensible en los tiempos específicos».

En ese sentido, el testimonio de Monseñor Lissón nos recuerda que Dios se encarnó en la historia y permanece escondido en nuestros acontecimientos, especialmente, en aquellas personas que nos hablan de Dios a través de su vida.

El Primado del Perú hizo hincapié en el paso de Monseñor Lissón como obispo de Chachapoyas, en una clara opción por los pobres que nos inspira a «vivir un cristianismo mucho más dinámico y menos colonial», en donde importen menos las jerarquías y prevalezca la vida comunitaria, teniendo en cuenta la sabiduría de la gente sencilla, sus intuiciones, su sentido común y todo lo que tienen para aportar en este mundo.

Si no atendemos los relatos de la gente, la teología se vuelve infecunda y estéril, porque no permite escuchar a ese Dios que está hablando en el corazón de la gente sencilla. Y eso tuvo Lissón: un enamoramiento por la gente sencilla y por los pobres.

La exposición sobre la vida y el ministerio episcopal de Monseñor Emilio Lissón estará abierta al público de manera gratuita desde el viernes 21 de septiembre en el hall del Palacio Arzobispal, de lunes a viernes de 2:00 a 4:30 pm y los sábados de 11:00 am a 2:00 pm.

Guiados por el lema «Y la Palabra se hizo joven, y habitó entre nosotros», nuestra Pastoral Juvenil de Lima anunció que el próximo 30 de septiembre se llevará a cabo la Tarde Sabatina de Oración Juvenil (inscríbete aquí), dirigido a jóvenes de 15 a 29 años. ¡Conoce aquí los detalles!

Con motivo del Día de la Biblia, la Pastoral Juvenil abrió las inscripciones para la Tarde Sabatina de Oración Juvenil. El evento, que tendrá lugar en la Basílica Catedral de Lima a las 5 de la tarde, tiene como propósito encontrarnos con Dios, con el prójimo y con uno mismo.

¿Quiénes pueden participar?

La Tarde Sabatina de Oración Juvenil será un encuentro donde se realizará una lectura bíblica en conjunto y se meditará en grupos a partir de la propia experiencia. Dirigido a todos los jóvenes de parroquias, comunidades, colegios, universidades y grupos juveniles, desde los 15 hasta los 29 años.

Si estás interesado(a) en participar, registra tus datos personales en el siguiente formulario:

Taller Sabatino de Oración Juvenil (Inscripción)

Como se recuerda, recientemente, más de 3500 jóvenes de diversas partes de la ciudad, vivieron la Jornada Arquidiocesana de la Juventud en el Colegio Claretiano. Fueron dos días de jornada, dinámicas, oración, festival musical, debates y plenarios. El lema bandera que acompañó a los jóvenes fue: «Joven, con la mirada de Dios a María, levántate a servir con alegría».

Nuestra Pastoral Juvenil comparte un recuento con los momentos más destacados de la Jornada Arquidiocesana de la Juventud (JAJ), encuentro que congregó más de 3500 jóvenes de los grupos parroquiales, agentes pastorales, universidades, colegios, comunidades y el equipo de trabajo. Todos unidos bajo el mismo lema: «Joven, con la mirada de Dios a María, ¡levántate a servir con alegría!».

Fotos: PJ Lima

La JAJ Lima 2023 tuvo su primera fecha el sábado 2 de septiembre, en donde miles de jóvenes se unieron para celebrar la fiesta de la juventud. La jornada inició con la participación de Monseñor Guillermo Elías, obispo auxiliar de Lima, realizando la oración que dio inicio a las actividades.

Posteriormente, fueron ingresando las banderas de colores que representaban los equipos de trabajo, mientras que la Cruz fue entronizada por un grupo de jóvenes. Por su parte, el equipo de voluntarios realizaba el registro de los participantes junto a la colaboración de la Hermandad del Señor de los Milagros.

Frente a la imagen de la Virgen de la Sabiduría, el equipo artístico de la Pastoral Juvenil de Lima, conformado por animadores, bailarines y la intérprete de nuestra canción oficial (Nicole Benites), pusieron a todas las personas a vibrar. Por último, se prosiguió con la obra de teatro preparada por los jóvenes artistas de nuestra arquidiócesis.

¡La juventud de Lima necesita ser escuchada!

En la segunda parte del primer día, se dio inicio a los trabajos en equipos de colores (verde, azul, amarillo y rojo), que fue planteada y dirigida por los líderes. A través de dinámicas, alabanzas y la metodología previamente explicada, los jóvenes respondieron dos preguntas importantes del VER:

-¿Cuáles son las situaciones que esperan hoy ser atendidas con prontitud por nosotros?
-¿Hacia qué lugares o realidades debemos salir presurosos, hoy, al encuentro?

Entre tanto, los líderes de cada subgrupo recogían las experiencias y realidades de cada uno de sus integrantes. De este modo se realizó el primer plenario de la jornada.

En paralelo, sacerdotes voluntarios estaban confesando en nuestro “Patio de la Misericordia” a todos los asistentes que buscaban recibir el sacramento de la Reconciliación.

¡La juventud de Lima unida a Jesús Eucaristía!

Al caer la tarde, los jóvenes retornaron al coliseo para un momento de adoración y oración ante el Santísimo Sacramento. El grupo Hakuna Lima acompañó este espacio de reflexión que permitió que los jóvenes pueda profundizar sobre todo lo vivido y compartido en los equipos de colores.

«Este momento especial y central de nuestra jornada nos ayudó a renovar nuestro compromiso de estar muy unidos a Jesús y ser testigos de su amor vivo en medio del mundo en el que vivimos», ha expresado nuestra Pastoral Juvenil.

¡La juventud de Lima se expresa mediante el arte!

Terminanda la Adoración Eucarística, el Coliseo Claretiano explotó en alegría y júbilo gracias a nuestros amigos de «Retumbayá», que con su batucada dieron inicio a la Noche cultural.

El festival cultural contó con la animación del influencer Diego Rivera, quien junto a Gianella, fueron los encargados de presentar a las agrupaciones artísticas de nuestra ciudad que nos deslumbraron con sus coloridas y festivas presentaciones de danzas de nuestro país, expresando así nuestra unión a todos los jóvenes que, en diversas partes de Lima, se asocian para formar verdaderas comunidades en torno al arte peruano.

¡La juventud de Lima baila, celebra y disfruta con alegría!

Finalizando el primer día de la jornada, contamos con la participación de nuestro amigo Elton Rey y los invitados estelares de la noche: «Foné», que hicieron vibrar, cantar y bailar a todos los jóvenes.

¡La juventud de Lima nos dejamos tocar por la Palabra de Dios!

Llegó el segundo día de la JAJ 2023, la jornada inició con la entronización de la Palabra de Dios en medio de cantos y la oración de todos los jóvenes que escucharon la Proclamación del Evangelio (Visitación de María a su prima Isabel).

Seguidamente, Monseñor Carlos realizó una charla en la que explicó a todos los chicos la importancia de dejarse mirar por el amor de Dios y así volcarse en servicio y generosidad a los hermanos más necesitados.

¡La juventud de Lima, reflexiona, dialoga y comparte inspirados por la Palabra de Dios!

Luego de escuchar la Buena Nueva del Evangelio, los jóvenes regresaron a sus equipos de colores para dialogar en torno a lo escuchado en la charla y todo lo compartido un día antes, de manera que respondieran a la pregunta:

“¿Que motivó a que la Virgen María se levantara a visitar Isabel y por qué motivos nos levantamos nosotros a servir a los demás?”

Asimismo, los chicos echaron a volar su creatividad mediante la elaboración de afiches donde plasmaran acciones significativas que respondan a las necesidades que compartieron en los plenarios.

«Alrededor del mediodía, gracias al apoyo de Cáritas Lima, compartimos un rico almuerzo y disfrutamos de un ameno momento de comunidad donde no faltaron los bailes, cantos y risas», informó Pastoral Juvenil en sus redes sociales.

¡La juventud de Lima celebra la Eucaristía con alegría y en comunidad!

Al empezar la tarde, los jóvenes regresaron al Coliseo para compartir los cantos y barras que prepararon durante el día. También estuvo presente el músico católico Daniel Ávalos. ¡Se vivió toda una fiesta de la juventud!

Al atardecer, tocó hacer los preparativos para celebrar en comunidad la Eucaristía presidida por Monseñor Carlos Castillo, donde también participaron sacerdotes, jóvenes acólitos y el coro juvenil de nuestra Arquidiócesis.

Durante la celebración de la Misa los jóvenes presentaron las peticiones que elaboraron en la Adoración del día anterior, las cuales fueron leídas por los concelebrantes y el Arzobispo. Antes de la homilía, cuatro representantes de los equipos de colores compartieron, ante todos los jóvenes, las conclusiones de cada plenario.

Durante su homilía, Monseñor Castillo invitó a los jóvenes a caminar con una fe inspirada en el amor de Dios que es gratuito, generoso y solidario. El arzobispo de Lima nos recordó a todos que si vivimos constantemente unidos al amor del Señor, nadie nos va a parar en el camino de una Iglesia de corazón ancho: «No nos van a parar, muchachos. ¡Vamos a seguir adelante! El Señor, con su Espíritu, alienta a toda nuestra juventud».

Finalmente, en las ofrendas se presentaron el Pan y Vino junto a otros dones que representan el ofrecimiento del trabajo previo a la jornada y de cada equipo de color que llevó los trabajos de reflexión.

¡La juventud de Lima se levantó!

Y para concluir la JAJ 2023, el toque musical lo pusieron los chicos de Foné y Freddy Mori, con un concierto especial que despidió la jornada hasta el próximo año.

Los frutos de la Jornada Arquidiocesana de la Juventud se materializarán en una carta pastoral. Este es un nuevo intento de la Iglesia por acercarse a las realidades de los jóvenes en un documento que reconozca sus aportes e ideas.

Sigue todas las novedades y publicaciones de la Pastoral Juvenil desde su página oficial de Facebook. También puedes encontrarlos en Instagram.

En el Santuario de Santa Catalina, cientos de personas se congregaron para participar de la Eucaristía en acción de gracias por los 101 años de fundación de la Hermandad del Señor del Santuario de Santa Catalina. La celebración estuvo oficiada por el arzobispo de Lima, Monseñor Carlos Castillo, quien estuvo acompañado del obispo auxiliar, monseñor Juan José Salaverry.

«Este Señor del Santuario que amamos y reconocemos como nuestro, nos ha convocado a ser hermanos», con estas palabras, el arzobispo de Lima inició su homilía, recordando a todas las generaciones que han pasado por la Hermandad del Señor del Santuario de Santa Catalina. «Es muy importante que toda hermandad sea siempre una comunidad cristiana, misionera y apostólica que anuncia el Evangelio y lo practica como el mismo Jesús», señaló.

El obispo de Lima aseguró que la humanidad está necesitada de hermanamiento: «Por eso, el Papa ha escrito su última Encíclica «Fratelli Tutti», hermanos todos. Y es una libre imagen que tenemos en nuestra tradición cristiana el que formemos no solamente comunidades, sino hermandades, porque la hermandad tiene algo más: somos comunidad, pero podemos pactar como hermanarnos los unos con los otros para solucionar diversos tipos de problemas».

Monseñor Castillo advirtió que la hermandad no debe ser entendida como un modo de complicidad para «amarrar cosas bajo la mesa» y «buscar el propio provecho». Por ello, es necesario acabar con las ambiciones de unos contra otros, renunciar a nuestros intereses egoístas y «que todos despertemos a un cristianismo inteligente, lúcido, que se da cuenta de los problemas y sale con alegría, como María, a servir».

Dios, que es nuestro Padre, nos protege y, con la sabiduría, nos va a ayudar a encontrar un camino de solución a toda esta crisis. Hay que tener fe y hay que pacificar el mundo, hay que hermanarlo.

Frente a la imagen del Señor del Santuario de Santa Catalina, el Primado del Perú recordó el testimonio de servicio de María, que se levantó y fue de prisa para socorrer a su prima Isabel. «Por eso, el Papa habla de la santa premura, la santa rapidez del cristiano, que es veloz para servir».

Y dirigiéndose a la generación joven de la hermandad, nuestro arzobispo hizo un llamado a recoger todo lo bueno de estos 101 años de fundación: «La Cruz de Cristo nos salva, nos inspira, nos hace intentar cosas nuevas, nos hace un cristianismo peregrino que va caminando con la gente en medio del temor, la fatiga y la lucha diaria».

Que todos podamos ser reengendrados con el Espíritu Santo para regenerar el mundo desde la hermandad. Gracias por durar estos 101 años.

Ha concluido la Semana de Formación Bíblica en el Instituto Superior de Estudios Teológicos Juan XXIII, con la asistencia de más de 500 personas, entre docentes, directores de colegios, agentes pastorales, laicos y religiosos. En la última jornada, Monseñor Carlos Castillo, arzobispo de Lima y Primado del Perú, reflexionó sobre el tema «La opción preferencial según San Mateo».

La ODEC Lima y AIEC organizaron cuatro días de formación bíblica , del 5 al 8 de septiembre. Por estas fechas, distintos ponentes reflexionaron una serie de temas con el fin de asumir con esperanza los retos que nos plantea la realidad peruana a la luz del mensaje del Evangelio.

En el día de clausura, Monseñor Castillo expuso algunos puntos claves en el Evangelio de Mateo que plantea como problema fundamental la ὀλιγοπιστία (oligopistia), es decir, «fe de pocos», de una élite. Eso es lo que Jesús remarcó a sus discípulos, refiriéndose a aquellos grupos «que tienen una fe completamente estrecha, como la de los sacerdotes, que no se interesaban para nada en el pobre».

«Si la Iglesia de Mateo tenía este problema es porque había heredado seis siglos de dominio de los sacerdotes, en donde implantaron una religión que cambió completamente la visión profunda de compromiso de Dios con la historia; y que se implantó con una serie de ritos y métodos de rituales, devociones, sacrificios y de holocaustos», comentó el prelado.

El arzobispo de Lima explicó que, cuando Mateo tiene que expresar cómo seguir a Jesús, encuentra «que la comunidad a la cual el Señor se dirige, tiene el obstáculo de que imitan, permanentemente, a los sacerdotes de Israel, al punto de querer ser como ellos. Entonces, no es que tenían poca fe, sino «demasiada fe» en la fe de los sacerdotes».

Este ha sido uno de los problemas que también ha heredado nuestra Iglesia, reiteró el Monseñor, y el Evangelio de Mateo nos puede ayudar a comprender que necesitamos liberarnos y aceptar que tenemos muchas cosas que redefinir en nuestra fe, sobre todo, esa concepción de que la fe es para unos pocos.

¿Por qué no es un problema de poca fe? Porque si es poca fe, se arregla con mucha fe. No es un problema cuantitativo, es cualitativo. Es un tema de profundizar en la fe, una fe universal, una fe capaz de enfrentar grandísimos problemas.

El Primado del Perú afirmó que Mateo pone los puntos sobre las íes en un sistema compuesto por un conjunto de reglas, leyes y sacrificios que «hacía lo que quería con la gente», olvidando toda capacidad de «apertura y reconocimiento de cada persona». En ese sentido, «Mateo nos da señales de que tenemos que estar alertas para que Jesús siga siendo comunicado y vivido, y para quitar todos los elementos que destruyen la posibilidad de amar y de ser amados por Jesús».

Para ejemplificar esta concepción cerrada de la religión israelita, Monseñor Castillo tomó como ejemplo el Bautismo de Jesús. Una vez bautizado, sale del agua y «se abrieron los cielos». Esta es una palabra muy importante, porque nos aclara que los cielos estaban cerrados, es decir, no había esperanza, «la ley había cerrado todas las posibilidades».

El Señor nos llama a ser cristianos abiertos, despiertos. ¿Quiénes son los cristianos de ojos cerrados? Los que todo el día repiten las mismas cosas de memoria y no esperan nada más.

El obispo de Lima recordó que debemos estar abiertos al misterio de Dios que siempre trae novedades. «La Iglesia tiene que predicar la claridad, pero la claridad, sabiendo que el misterio de Dios se respeta. Las definiciones no arreglan las cosas, lo que arreglan las cosas es la inspiración, la apertura, el tener claro que siempre hay una profundidad mayor, porque Dios no ha consumado todavía la historia definitivamente».

Si somos Iglesia, el punto esencial es el testimonio del amor gratuito sin condiciones, sin requerimientos y en total generosidad, como lo hizo Jesús que es lo que genera vida.

Por estos días se viene desarrollando la Semana de Formación Bíblica, con la concurrencia de cientos de docentes, agentes pastorales y laicos. La iniciativa, promovida por ODEC Lima y AIEC, concluirá este viernes 8 de septiembre con la participación de Monseñor Carlos Castillo.

Durante el segundo día de formación bíblica, se desarrolló el tema: “La Iglesia según el Evangelio de San Mateo”, a cargo del padre Eduardo Arens, catedrático de amplia experiencia y sacerdote de la Sociedad de María (Marianistas).

Arens explicó que el enfoque del Evangelio de Mateo es de carácter catequético, porque muestra a Jesús, sobre todo, como maestro. «Su óptica es institucional y comunitaria. Además, Mateo va a marcar la diferencia entre el judaísmo de Jesús y el judaísmo de los maestros de la ley y fariseos», refirió.

En la segunda fecha también intervino Bruno Príncipe Cotos, docente de educación superior en el Instituto Superior de Estudios Teológicos ISET Juan XXIII, quien habló sobre la importancia de «entrar en el mundo del autor para poder vibrar y sentir esa experiencia de hombres y mujeres que están detrás de los textos». Desconocer el contexto podría desencadenar «muchos obstáculos en la interpretación».

Los cuatro Evangelios fueron escritos como testimonio de la presencia viva y activa de Jesús de Nazaret, el Cristo, que se encontraba presente, en medio de sus comunidades.

Llamados a ser verdaderos discípulos de Jesús

El tercer día de formación bíblica estuvo a cargo del padre Jorge López Martínez-Vargas, doctor en Sagrada Teología por la Universidad de Navarra, quién desarrolló el tema: El discipulado según el Evangelio de San Mateo.

Al inicio de su charla, remarcó que cada evangelista escribe para una comunidad concreta, atendiendo a las necesidades de la realidad que se vive. «Jesús ha llamado a discípulos totalmente heterogéneos: algunos eran pescadores, cobradores de impuestos, de diferentes edades. Ellos han convivido con el Señor, han visto los milagros, han escuchado su Palabra de la que tomaron nota. Y son ellos los que van a difundir el Evangelio”, afirmó.

Por su parte, el magister Hugo Saavedra, coordinador de ODEC Lima, intervino recalcando el llamado que nos hace el Señor a vivir en la hermandad y poner en práctica la fraternidad:

«Dios invita a sus discípulos a hacerse pequeños y humildes para servir al hermano, en especial, al más vulnerable. Dios no nos pide nada que Él no haya hecho, nos invita a hacernos pequeños como los niños, haciéndose Él pequeño primero, viniendo a nosotros frágil, vulnerable y pobre. Y el discípulo es aquel que acoge al pequeño y al frágil”, reflexionó.

La Semana de Formación Bíblica concluirá este viernes 8 de septiembre con la ponencia de nuestro arzobispo de Lima, Monseñor Carlos Castillo, que abordará el tema: “La opción preferencial según el Evangelio de San Mateo. Puedes seguir la transmisión a través de la página de ODEC Lima.

Bajo el lema: “Ustedes son la Sal y Luz del mundo”, se inició la Primera Semana de Formación Bíblica, organizado por la Oficina de Educación Religiosa del Arzobispado de Lima (ODEC Lima) y la Asociación de Instituciones Educativas Católicas (AIEC).

Más de 500 personas se dieron cita en el Instituto Superior de Estudios Teológicos (ISET Juan XXIII), para participar de la primera fecha de formación a la luz del Evangelio de Mateo.

Al inicio de la jornada, Monseñor Guillermo Elías, obispo auxiliar de Lima, recordó, en palabras del Papa Francisco, que la Palabra de Dios es viva, no muere ni envejece, sino que permanece para siempre: «La Palabra se mantiene joven ante todo lo que pasa y conserva, a quien la pone en práctica del envejecimiento interior. Está viva y da vida», señaló.

El obispo auxiliar exhortó a que estos cuatro días de formación contribuyan a «disfrutar y profundizar de la Palabra de Dios, a dejarse encontrar y transformarse por ella, y que la luz del mensaje del Evangelio de Mateo nos ayude a asumir, con esperanza, los retos que nos plantea la realidad peruana, para que nuestro testimonio haga visible el mensaje de Jesús”.

El primer día de Formación Bíblica contó con la participación del Padre Mario Yépez Barrientos, sacerdote y misionero de la Congregación de la Misión-Vicentinos, quien abordó el tema: “La promesa según el Evangelio de San Mateo”.

En el desarrollo de su ponencia, el Padre Yépez explicó que una particularidad del Evangelio de Mateo es que nos permite hacer un discernimiento serio de la figura de Cristo: «Los valores del Reino propuesto por Jesús y su mensaje invierten decididamente en los valores de este mundo», acotó.

En otro momento, tuvo lugar la intervención del Padre Tomás Pablo Agustín Garván Orellana, sacerdote diocesano de nuestra Arquidiócesis, quien afirmó que la revelación de Jesús a los hombres también se manifiesta a través de los sacramentos, «medios humanos para estar cerca del Señor».

La Semana de Formación Bíblica continuará en los próximos días con ponencias de especialistas y teólogos. Cada jornada se transmitirá a través de la página de Facebook de ODEC Lima.

«No nos van a parar, muchachos. ¡Vamos a seguir adelante! El Señor, con su Espíritu, alienta a toda nuestra juventud», con estas palabras, Monseñor Carlos Castillo dio cierre a la Jornada Arquidiocesana de la Juventud (JAJ), que este año congregó a más de 3500 jóvenes de nuestra ciudad, todos unidos bajo el lema: «Joven, con la mirada de Dios a María, ¡levántate a servir con alegría!».


Fotos: cortesía de PJ Lima

Durante el 2 y 3 de septiembre, miles de jóvenes se reunieron en el corazón de la capital peruana para vivir la jornada arquidiocesana de la Iglesia de Lima. En espíritu sinodal con la Jornada Mundial de la Juventud y el Papa Francisco, este año la JAJ convocó a grupos muy variados: desde los grupos de danzantes en las plazas de nuestra ciudad y jóvenes universitarios, hasta los colegios parroquiales y comunidades juveniles de nuestros 12 decanatos.

La organización del evento estuvo a cargo de la comisión central de la Pastoral Juvenil, con el apoyo solidario de más de 400 jóvenes voluntarios (equipo de baile, líderes, animadores, comunicadores, actores, logística, entre otros). Y fue precisamente la auto-organización de la juventud, uno de los aspectos más valorados por el arzobispo de Lima, que, en su homilía, resaltó la gran capacidad que tienen los jóvenes para establecer lazos y anunciar el Evangelio.

Leer transcripción de homilía de Monseñor Castillo

En su homilía, Monseñor Castillo recordó al Cardenal Augusto Vargas Alzamora, siempre comprometido con la causa de los jóvenes y que, hace 23 años, un 4 de septiembre, partió al Padre: «En esa época, los jóvenes estaban regados por todos lados. Y el cardenal me decía: Necesitamos hacer una pastoral juvenil porque los chicos están en la calle. Ellos necesitan aliento y el Evangelio porque sufren mucho», comentó.

Plenario con los jóvenes de Lima

Antes de la Misa de clausura, la JAJ tuvo varios momentos: adoración Eucarística, festival cultural, dinámicas de integración, debates grupales, teatro y conciertos. Los dos días de jornada se planificaron bajo el método: Ver – Juzgar – Actuar.

En la segunda parte del primer día, se iniciaron los trabajos en equipos de colores (verde, azul, amarillo y rojo) que fue planteada y dirigida por los líderes, mediante dinámicas, alabanzas y la metodología previamente explicada, los jóvenes respondieron dos preguntas importantes del VER:
-¿Cuáles son las situaciones que esperan hoy ser atendidas con prontitud por nosotros?
-¿Hacia qué lugares o realidades debemos salir presurosos, hoy, al encuentro?

En paralelo, sacerdotes voluntarios estaban confesando en nuestro “Patio de la Misericordia” a todos los asistentes que buscaban recibir el sacramento de la reconciliación.

Posterior a esta reflexión, en la mañana de la segunda fecha, los jóvenes iniciaron la jornada con la entronización de la Palabra y la lectura del Evangelio (Lucas 1, 39-56 – La Visitación). Luego se juntaron en grupos para responder la siguiente pregunta (JUZGAR – ACTUAR): ¿Que motivó a que la Virgen María se levantara a visitar Isabel y por qué motivos nos levantamos nosotros a servir a los demás?

Uno de los espacios más esperados fue el Plenario de los jóvenes, donde los representantes juveniles manifestaron sus principales preocupaciones, sentires y aportes. Escucha el plenario completo aquí:

¿Hacia qué realidades debemos salir presurosos? Fue uno de los cuestionamientos que abordaron los miles de jóvenes en el Colegio Claretiano. «Toca ir a la cancha. Hay que levantarnos, como María, para servir con alegría», expresó uno de los representantes juveniles.

«Cada joven atraviesa por una situación distinta – aseguró Alessia Tirado Díaz – Es ahí que, con la ayuda de Dios, podemos tomar acción y cambiar la sociedad en la que vivimos, teniendo en cuenta siempre un valor: la empatía, el ponerse en el lugar del Otro y, a partir de ahí, actuar».

Dice María: “He aquí la esclava del Señor, hágase en mí, según tu Palabra”. Ante ello, los diferentes grupos reflexionaron sobre la actitud de servicio de la Madre de Dios ¿Aplicamos esto en nuestra vida diaria? «El Señor nos motiva a levantarnos y a servir a los demás, porque, comprendiendo la realidad de cada uno y de nuestro prójimo, podemos llegar a Dios», respondieron.

Los jóvenes somos la Iglesia viva

Otro de los testimonios fue el de Walter Araujo, que compartió las conclusiones de su comunidad: «Nosotros somos la Iglesia viva … ¡debemos movernos! Somos una nueva generación de jóvenes dispuestos a llevar a Cristo, y tenemos el ejemplo de María para inspirarnos», indicó.

Por su parte, Franchesca Matos, recordó que el servicio de María nace del amor y de la empatía. Por ello, los jóvenes también «estamos llamados a actuar solidariamente para sacar una pequeña sonrisa al prójimo, sin esperar nada a cambio, solo esa felicidad que podemos brindar al que nos necesita».

En el Plenario también se comunicaron algunas de las preocupaciones más hondas de los jóvenes: «minimizan nuestros sentimientos y opiniones, nuestros problemas. Y nosotros también minimizamos lo que pensamos, lo hacemos «tan chiquito» que nos sentimos solos».

Monseñor Castillo: «Reconocer y escuchar la expresión humana de los jóvenes»

En su homilía, el arzobispo de Lima explicó que los frutos de la Jornada Arquidiocesana de la Juventud se materializarán en una carta pastoral. Este es un nuevo intento de la Iglesia por acercarse a las realidades de los jóvenes y plasmar sus palabras en un documento que reconozca sus aportes e ideas.

Por ello, el prelado afirmó que «la Iglesia se hace siempre sinodalmente. Se dice sinodal en el sentido que se comparte, se discute y se conversa para poder escuchar. Las manifestaciones alegres de los jóvenes son importantes porque son expresión humana llamada a ser escuchada y reconocida», precisó.

Comentando el Evangelio de Mateo (16,21-27), Monseñor Carlos señaló que el Señor nos llama a dejarnos llevar por su Espíritu, sin embargo, cuando el camino representa un desafío difícil, pueden surgir algunas resistencias. Esto ocurrió con Pedro, que rechazó la idea de que el Hijo de Dios deba padecer y entregar su vida por los demás.

Del mismo modo, explicó el Primado del Perú, a veces, «pensamos que, porque Dios está con nosotros, podemos hacer lo que sea. Es verdad que el Señor nos aguanta, eso es seguro, pero nos corrige también, y nos corrige de una manera muy interesante, abundando en su amor hacia nosotros».

Encender la «chispa» de los jóvenes

En la liturgia del domingo XXII del Tiempo Ordinario, el amor del Señor induce a que Pedro reflexione sobre su actitud. Y ese amor también nos induce a pensar: ¿Estaré haciendo bien con lo que estoy diciendo? Por eso, el obispo de Lima invitó a todos los jóvenes a dejarse inspirar por el Espíritu del Señor que está «regado por todos lados» y «aparece en todas las cosas porque ha tocado a la humanidad».

Ante la mirada de los miles de jóvenes, Monseñor Carlos invocó a «encender la chispa» que genera el fuego del amor en todo el país. «Todos los jóvenes, inclusive, los “malandros” que andan por ahí, robando celulares, pueden ser aquellos que, en medio de sus equivocaciones, con el Espíritu del anuncio de todos los que estamos acá y de todos nuestros hermanos de las demás parroquias, logren que la juventud empiece una nueva etapa en la historia de nuestro país: la historia del hermanamiento nacional».

Dios no está en el más allá, sino que se ha metido en el “más acá”; se ha metido para que nosotros aprendamos a acogerlo, a recibirlo, y para que este mundo sea un anticipo del Reino de Dios. Ése es el objetivo.

Carlos Castillo reiteró que todas las necesidades y preocupaciones de los jóvenes deben ser vividas con un sentido de amor y servicio, acogiendo al Espíritu que nos da su soplo para actuar adecuadamente según las circunstancias.

«El arte, la música, la danza, son también expresiones del Espíritu. Dios también puede estar en la calle, con nuestros jóvenes danzantes. Por eso, el Papa dice que la Iglesia es en salida, porque está potencialmente en todos los que buscan, pero se necesita el aliento, el llamado, la comunicación, el Evangelio, la evangelización, no el adoctrinamiento (eso viene después porque perfecciona la evangelización)», argumentó el arzobispo de Lima.

Vamos a darle gracias a todos por haber venido hoy. Vamos a comprometernos como María, en sintonía con todo lo que se hizo en la Jornada Mundial de la Juventud.

La JAJ 2023 culminó con un concierto musical.

La Comisión Arquidiocesana de Fe y Cultura, en coordinación con el Archivo Arzobispal de Lima, llevaron a cabo el II Taller de Conservación Preventiva de Documentos, dirigido a los párrocos, trabajadores y trabajadoras de las parroquias.

El sábado 26 de agosto tuvo lugar una nueva edición del Taller de Conservación Preventiva de Documentos, una iniciativa de nuestro Archivo Arzobispal que tiene como objetivo dar a conocer las técnicas de limpieza manual de archivos y documentos.

Durante el taller, se entregó a los participantes un kit de bioseguridad y limpieza (mascarilla KN95, guantes, gorro descartable, guardapolvo descartable, borrador, bisturí, cuchilla, rallador y brocha).

El taller fue impartido por el conservador del Archivo Arzobispal, el señor Carlos Espinal Bedregal. Al inicio de su ponencia, Espinal habló sobre la forma de realizar la limpieza en los archivos, así como la importancia de mantener en buen estado los documentos.

En un segundo momento, se explicó el uso del equipo de bioseguridad personal y los pasos para armar una cabina de limpieza con materiales que se pueden encontrar en cualquier despacho parroquial.

El II Taller de Conservación Preventiva de Documentos contó con la presencia del presidente de la Comisión de Fe y Cultura, el Padre José Antonio Ubillúz; la directora del Archivo Arzobispal, Kelly Montoya.

Próxima edición en noviembre

De igual manera, se anunció que en el mes de noviembre se realizará el tercer y último taller de conservación preventiva de este año. Es importante resaltar que la conservación preventiva es de suma importancia para mantener nuestros documentos en un buen estado.

En ese sentido, las parroquias son la primera línea de la cadena de conservación de nuestra Institución.

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