El padre Dornelas y la señora Oliveira, dos expertos participantes en el Sínodo, expresaron su opinión acerca del tema de los migrantes y cómo afecta a la región amazónica, con sus derivadas consecuencias, entre ellas, el fenómeno de la trata de blancas.
Durante el briefing de hoy, también se habló de la sinodalidad, ese caminar juntos, un nuevo modo de ser Iglesia, esto se plasma en las congregaciones religiosas y las diócesis amazónicas, entre organizaciones indígenas, dijo uno de los participantes en el briefing, padre Giacomo Costa, también dijo que en la congregación de la mañana se “ha planteado establecer un observatorio amazónico cultural para seguir el caminar de la Iglesia en esta región”.
Otra cosa que se dijo fue que “las diversas crisis migratorias se han dado a razón de la llegada de diversos flujos migratorios. Se ha tratado de proponer una colaboración entre las iglesias para acompañar a los migrantes”.
Cómo acompañar a los flujos migratorios
El padre Sidney Dornelas, misionero escalabriniano de Argentina, y experto en estudios migratorios en el continente, explicó en una entrevista cómo responde la Iglesia a las necesidades de la gente en región amazónica. Y promoviendo una estructura de cooperación misionera que prepare proyectos específicos. Una organización que acompañe los flujos migratorios.
Los fenómenos migratorios en la región
Por su parte, Marcia María de Oliveira Brasil, experta en historia de la Iglesia en la región, habló sobre los efectos sociales y económicos que acarrea en la región los fenómenos migratorios.
La región tiene el número más grande de migraciones actualmente, no sólo a nivel interno, del campo a las ciudades sino además internacionalmente, por consiguiente, es importante que exista una pastoral de los migrantes en la zona.
La señora Oliveira espera que después del sínodo surja un refuerzo de la pastoral en su conjunto. Es necesario no sólo acoger como propone el Evangelio a los migrantes, sino también, defender, atender e integrar.
